El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha traído este lunes a Barcelona su mensaje de convivencia y concordia para buscar una solución al conflicto político catalán, si bien ha instado a renunciar a "posturas maximalistas" y "callejones sin salida" para llegar a acuerdos de reencuentro que permitan el progreso.
En un acto con motivo del 250 aniversario de la patronal catalana Foment del Treball en el que ha coincidido por primera vez con Pere Aragonès desde su toma de posesión como presidente de la Generalitat, Sánchez ha reivindicado "dejar atrás un escenario de crisis, conflicto y enfrentamiento que tantos años después solo ha traído un triste balance de dolor, pobreza y estancamiento".
Por su parte, Aragonès ha defendido la apertura de una etapa de normalización política con propuestas de soluciones desde todas las partes para "superar el bloqueo y avanzar de nuevo" hacia la prosperidad y la libertad de todos, y ha recordado que su postura es la de la defensa de la amnistía y la autodeterminación.
El presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, ha pedido a los presidentes español y catalán que "no se cansen de dialogar porque Catalunya y España lo necesitan", y también les ha solicitado acuerdos para proyectos estratégicos de futuro como la ampliación del Aeropuerto de Barcelona y la candidatura para los Juegos Olímpicos de Invierno Barcelona-Pirineos 2030.
Indultos e unilateralidad
La predisposición de PSOE y ERC para encontrar una salida al conflicto político catalán también se ha plasmado este lunes en la carta publicada por Oriol Junqueras en la que celebra la vía de los indultos –sin renunciar a la defensa de la amnistía- y afirma que la vía unilateral independentista no es viable ni deseable.
Asimismo, el ministro de Política Territorial y Función Pública, Miquel Iceta, ha defendido los indultos a los líderes del procés como una apuesta "bastante sensata" para la "reconciliación" y ha deslizado que la decisión sobre su concesión estará lista antes de verano, según Europa Press.
Sánchez y Aragonès tienen pendiente de agendar su primer encuentro oficial en Moncloa este mes, aunque el presidente español volverá a Barcelona la semana que viene, para la reunión anual del Círculo de Economía en el Hotel W y para un foro de diálogo entre España e Italia que organizarán en la sede de Foment la CEOE, la Sociedad Barcelonesa de Estudios Económicos y Arel.
