
El impacto del covid en la actividad ferial con la suspensión y aplazamiento de los certámenes o su edición virtual han reducido en un 62,72% los ingresos de Fira de Barcelona, hasta los 80 millones este 2020, y un Ebitda de 100.000 euros.
Pese a las incertidumbres existentes para 2021, la institución prevé recuperar su actividad presencial la próxima primavera con el Saló de l'Ensenyament, después de Semana Santa, y luego será el turno de Automobile.
La celebración de los eventos más internacionales se abrirá con Alimentaria, del 17 al 20 de mayo, certamen al que seguirán el encuentro de móviles MWC Barcelona y el del sector audiovisual Integrated Systems Europe (ISE), en junio.
La vuelva a una relativa normalidad debería facilitar la recuperación del negocio de Fira de Barcelona hasta los 125 millones en 2021, aún por debajo de los niveles de 2019, año en el que la facturación ascendió a los 220 millones.
Así lo ha explicado este viernes en la rueda de prensa de balance el director general de Fira de Barcelona, Constantí Serrallonga, acompañado del presidente del consejo de administración de Fira de Barcelona, Pau Relat; la presidenta del Consell General de Fira de Barcelona y alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y el conseller de Empresa y Conocimiento, Ramon Tremosa.
Sobre la evolución de este año, Serrallonga ha destacado que se trata de un resultado "de equilibrio" que sale del conjunto de eventos físicos y virtuales durante el año y de los servicios prestados y ha asegurado que les sitúa en una posición de salida de cara a 2021, año que afrontan con mucha ambición con la planificación de un centenar de certámenes para el conjunto del próximo año.
Al formato presencial, en el que se aplicarán todas las medidas de seguridad y prevención contempladas en el preciso protocolo elaborado por Fira, con el asesoramiento del Hospital Clínic de Barcelona, se le sumará, en muchos casos, su vertiente digital, con el fin de ampliar su proyección e impacto internacional.
El director general de la institución ha subrayado el importante esfuerzo de contención de costes aplicado por la institución, entre los que se incluye un Erte para toda la plantilla, de carácter flexible y con diferentes grados de afectación, y que está previsto levantarlo a principios de 2021.
El presidente de Fira de Barcelona, Pau Relat ha destacado que "los protocolos de seguridad y prevención que hemos desarrollado, junto al avance de tratamientos, vacunas y tests rápidos, pueden ser la clave para la reactivación de la movilidad internacional y del sector ferial". Relat ha querido poner también en valor el compromiso social demostrado por Fira durante los peores meses de la crisis sanitaria mediante la cesión de pabellones y donación de alimentos a diversas entidades.
Proyecto de ampliación
Fira de Barcelona mantiene activado el proyecto de ampliación de sus instalaciones, que retomará en 2021. Así, se seguirá desarrollando el plan de ampliación del recinto de Gran Via, que supondrá un incremento del 25% de su superficie actual y permitirá el crecimiento de los salones existentes y la captación de nuevos eventos.
Asimismo, para proyectos de digitalización, innovación, sostenibilidad e infraestructuras Fira opta a acceder a los fondos europeos de recuperación Next Generation EU.
Por otro lado, a finales del próximo año, Fira de Barcelona asumirá la gestión del Centro de Convenciones Internacional de Barcelona (CCIB) que, con sus 100.000 metros cuadrados y más de un centenar de eventos anuales, reforzará la estrategia global de Barcelona en materia de ferias y congresos al permitir un desarrollo integral de los diversos equipamientos feriales de la ciudad.
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