La dirección de Seat ha comunicado este viernes a los representantes sindicales el inicio de la negociación de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (Erte) para unos 11.000 trabajadores (el 74% de la plantilla) por causas organizativas, que se aplicaría en el momento en el que se reinicie la actividad en los centros de producción.
La intención actual es poder hacerlo el 27 de abril "si en esa fecha se dan todas las condiciones que lo permitan" y que el Erte tenga una duración máxima de ocho semanas, hasta que se retome el ritmo de producción previo al inicio de la pandemia, según ha publicado La Vanguardia y han informado a elEconomista desde fuentes de la compañía del grupo Volkswagen.
El motivo de este Erte es que, mientras las medidas acordadas de prevención y protección para velar por la salud de los empleados estén en vigor, no se podrán recuperar los niveles de producción previos a la crisis del Covid-19.
El Erte afectaría únicamente al personal relacionado con el proceso productivo y se aplicaría de forma gradual con las mismas condiciones que el Erte por causas de fuerza mayor actual, que incluye a toda la plantilla, unas 14.800 personas. El número de afectados se reducirá a medida que se incremente el volumen de producción.
Seat no es la primera automovilística –ni será la última- que prevé un nuevo Erte para afrontar la reactivación paulatina de la producción tras el parón del último mes. Hace unos días, PSA planteó uno para su factoría zaragozana de Figueruelas con vigencia hasta finales de julio.