
Las emisiones de bonos verdes se recuperan. Allen & Overy ha asesorado al sindicato bancario, liderado por Goldman Sachs Bank y UBS Investment Bank, en la colocación de un bono verde a cinco años por importe de 270 millones de euros para financiar la compra de Amara NZero, antigua filial de materiales eléctricos de Iberdrola, por parte del fondo británico Cinven.
La adquisición de la compañía, una de las principales distribuidoras de instrumental para autoconsumo solar, se valoró en 800 millones de euros. El bufete A&O asesoró a los bancos en los aspectos legales de la colocación.
El instrumento de deuda sostenible, con vencimiento en 2028, se ha emitido a través de la sociedad Green Bidco y se ha colocado a un precio del 10,25%. Incluye además una línea de crédito RCF super senior por importe de 50 millones de euros, por lo que el paquete total de deuda se eleva a 320 millones de euros.
Primera 'apuesta al verde'
La colocación del bono de Amara Nzero supone la primera emisión de bonos verdes de alto rendimiento (high yield) realizada en el marco de una adquisición apalancada (LBO) en 2023 y el primer bono con calificación B para un emisor debutante en el mercado europeo high yield.
Cinven firmó la compra a finales del pasado mes de abril con una de valoración estimada de 800 millones de euros. Sus anteriores dueños, el fondo español ProA Capital y el equipo directivo liderados por el presidente del grupo, Pablo Arnus, y Gonzalo Errejón, consejero delegado, reinvirtieron para continuar como socios minoritarios del grupo en la nueva etapa.
Hasta hace seis años años, Amara era la filial de material eléctrico de Iberdrola, que traspasó a un grupo de inversores capitaneados por su actual presidente ejecutivo, Pablo Arnús, y organizados en la sociedad inversora Anemona Logística. En julio de 2021, ProA tomó el 60% del grupo madrileño para seguir impulsando su crecimiento.