
El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, ha asumido que la entidad asumirá el pago del impuesto de hipotecas, el impuesto de Actos Jurídicos Documentados (AJD), si el próximo 5 de noviembre el Tribunal Supremo decide ratificar la sentencia en la que se declara nulo el artículo del impuesto que señala que el cliente debe liquidar el tributo. El ejecutivo ha puesto en duda que el cliente termine soportando un incremento del precio de las hipotecas ya que va "depender de la fuerte competencia que tiene este segmento".
La presentación de resultados de Bankia del tercer trimestre ha estado marcada por el posible cambio de criterio a la hora de pagar el AJD por parte del Tribunal Supremo, el próximo 5 de noviembre. El número dos del banco ha defendido que los bancos "han hecho en los últimos años lo que marca la ley", refiriéndose a que el cliente venía asumiendo la liquidación de este tributo, y "esperamos un pronunciamiento claro y nítido, si se cambia la ley, lo normal es que no hubiera retroactividad, ni penalización".
Sobre las consecuencias de que las entidades financieras puedan asumir el pago del AJD, Sevilla ha explicado que "no se debería repercutir al cliente si hay un cambio de criterio, la repercusión en precio va a depender de la competencia y en este segmento es muy fuerte".
El directivo ha defendido que el sector "ha ayudado a miles de familias acceder a la vivienda en propiedad a un coste bajo y mucho más barato que en otros países europeos". Sevilla ha remarcado que los bancos deberían mantenerse en esa línea y que por parte de Bankia va a continuar con la misma oferta de hipotecas.
Sevilla ha reconocido que se está produciendo un retraso en la firma de hipotecas y que continuará hasta que se despeje la incertidumbre. "El cliente que puede esperar, lo hace para cerrar la operación con la mayor seguridad posible, pero la demanda no se está deteniendo, sigue habiendo solicitudes y peticiones de hipotecas", ha aclarado. Por su parte, el director financiero de Bankia, Leopoldo Alvear, ha admitido que la situación generada por el Tribunal Supremo está generando incertidumbres entre los inversores para todo el sector bancario, "a la espera de que se resuelva el alcance de la sentencia". "No debería tener grandes incidencias si no hay efecto retroactivo", ha añadido.
Pide una nueva ley hipotecaria clara y que defina unas reglas del juego transparentes
Sobre la nueva ley hipotecaria, Sevilla ha expresado su deseo de que se apruebe pronto, ya que considera que el proceso se está alargando "más tiempo del razonable". En cualquier caso, ha reclamado que sea una ley clara y que defina unas reglas del juego claras y transparentes.
"Que esa incertidumbre que ahora parece que se está produciendo en el mundo de las hipotecas se reduzca al máximo posible y que tengamos unas reglas del juego claras para todos", ha reclamado.
Sobre la posible privatización de Bankia, Sevilla ha reconocido que la estrategia de esperar a que mejore el mercado y suba el precio de la acción para acometer la privatización de la entidad "tiene sentido", y ha mostrado su confianza en que los mayores beneficios en los próximos trimestres dentro de su plan estratégico redunden en el incremento del precio de sus títulos.
Así lo ha indicado durante la presentación de los resultados del tercer trimestre de 2018, en un contexto en el que la acción de Bankia ha descendido con fuerza y se sitúa muy por debajo del precio al que el FROB vendió los últimos dos paquetes de acciones.
"No es el mejor momento para llevar a cabo un proceso de privatización"
Sevilla ha asegurado que la caída en Bolsa está afectando a todas las entidades bancarias, tanto españolas como europeas, si bien reconoce que "no es el mejor timing para llevar a cabo un proceso de privatización".
"Habrá que esperar, pero estoy convencido de que seremos capaces de ir haciendo la entrega de beneficios que redundará en un precio de la acción más elevado. Sobre cambiar el plazo de la privatización, creo que es el Ministerio el que se tiene que pronunciar y es él quien lo tiene que valorar", ha señalado el directivo.
En este sentido, ha destacado que el proceso de integración con BMN está avanzando más rápido de lo previsto, ya que el ERE se completará el próximo mes de noviembre, cuando el plan inicial contemplaba que tendría lugar en 2019.
"Esto nos está haciendo anticipar ahorros de costes y pensamos que en 2019 el 100% de estos ahorros los habremos capturado en la cuenta de resultados; es un tema de hacer las cosas más rápido y eso tiene un fin, mejorar el beneficio y la rentabilidad a futuro", ha explicado Sevilla.
Sobre el incremento de las posiciones cortas en el capital de la entidad, el consejero delegado de Bankia no se ha mostrado preocupado. "Muchas veces las estrategias de los inversores son difíciles de leer y responden a cuestiones que tienen poco que ver con los valores de Bankia", ha indicado Sevilla, quien ha afirmado que monitorizan la actividad de los inversores bajistas pero sin "especial preocupación" por ella.
Por otro lado, el directivo ha valorado los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2019. "Lo importante es que sean presupuestos comprometidos con los objetivos de déficit que tenemos con Europa, que parece que lo son, que nos permitan seguir reduciendo déficit público y afrontar los principales desequilibrios de la economía española, que son el exceso de deuda y el desempleo", ha señalado Sevilla.