
En un entorno de tipos más bajos, las comisiones sirven a la banca como escudo para sostener sus ingresos y sus márgenes, que en los últimos dos años han sido engordados por un ciclo de política monetaria estricta. Santander espera que los ingresos cosechados por esta vía de negocio aceleren a lo largo de los próximos meses, impulsados principalmente por los productos tanto de seguros como de banca corporativa y de inversión, según señaló su consejero delegado, Héctor Grisi, en una conferencia financiera organizada por Goldman Sachs.
El banco presidido por Ana Botín elevó sus comisiones netas un 4% en el primer trimestre frente al mismo período del año pasado -un 9% sin tasa de cambio- gracias al crecimiento en banca de empresas y de inversión (Corporate & Investment Banking, CIB, por sus siglas en inglés) que logró compensar la caída en el segmento de consumo.
En CIB, una de las cinco líneas de negocio en torno a las que la entidad se reorganizó con el plan One Transformation, Santander incrementó su margen bruto un 8% entre enero y marzo. La actividad de Global Markets, que ofrece soluciones para gestión de riesgo, liquidez, coberturas, entre otras, vio un fuerte empuje, con un aumento de los ingresos del 23%, hasta 993 millones de euros.

A pesar del entorno de incertidumbre geopolítica, el banco cántabro apostó por reforzarse en las salidas a bolsa, al ejecutar como coordinador global o bookrunner seis ofertas públicas de venta (OPV) -entre ellas la de HBX-, que recaudaron aproximadamente 4.000 millones de dólares. Escaló así al séptimo puesto en el ranking mundial de OPV y al segundo en el de Estados Unidos, según datos de la consultora Dealogic.
Johann Scholtz, analista de Morningstar, recordó que Santander ha ido incrementando sus inversiones en banca de inversión, aunque el reto será conducir el negocio de forma rentable. "Los bancos más pequeños han tenido dificultades para igualar la rentabilidad de las entidades estadounidenses más grandes -bulge bracket, en inglés-, excepto cuando compiten en nichos de mercado muy específicos", agregó.
El momento de vida-ahorro
Donde la banca está encontrando un filón de ingresos es en el negocio de seguros. Según las cifras del Santander del primer trimestre, el volumen de primas brutas alcanzó los 2.666 millones de euros, lo que supone un 4% más. La entidad lo justifica por "el buen desempeño de los productos de ahorro". El incremento de tipos hizo que los seguros ofrecieran rentabilidades atractivas, mientras que los depósitos no siguieron esa tendencia. En 2024, en plena distensión de la política monetaria, estos seguros vivieron un descenso considerable respecto al año anterior por la competencia precisamente con los productos bancarios. Ahora, a pesar de que los tipos continúan a la baja, aseguradoras y bancos están volviendo a potenciar estos productos, y así lo reflejan las cuentas de las compañías especializadas en este ramo.
Pero además de eso, Santander vende seguros generales a través de alianzas. En España tiene varias joint venture con Mapfre y Aegon, y en todas ellas el desempeño ha sido notable, en parte, por el incremento de las primas fruto de la inflación. Lo mismo ocurre con su socio en Latam, Zurich, donde vende coberturas de vida, accidentes, autos y hogar.
Con los ojos en el M&A
En un contexto de creciente apetito por la consolidación en el sector bancario europeo, Grisi aseveró en la conferencia de Goldman que en cuanto a oportunidades de fusiones y adquisiciones el Santander mantendrá un enfoque en el crecimiento orgánico en EEUU y Portugal, mientras que en México podrían considerar una oportunidad inorgánica solo si el retorno de la inversión es superior al 20%.
México es un mercado clave para el Santander. El pasado febrero, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció que el banco iba a invertir 2.000 millones de dólares en el país, que se destinarán en su mayoría a infraestructuras y a pymes. A la vez, el banco digital del grupo, Openbank, inició allí sus operaciones y a lo largo de los próximos meses irá incorporando más productos y servicios en su oferta.
Aunque la número uno de la entidad, Ana Botín, recordó varias veces que el banco tiene mucho margen para crecer de forma orgánica y que no necesita de fusiones o adquisiciones para hacerlo, los ojos del Santander siempre están puestos en el mercado del M&A. La semana pasada, su filial británica manifestó interés por adquirir el negocio local de Banco Sabadell, TSB, aunque todavía no ha presentado una oferta formal y no sabe si lo acabará haciendo, según adelantó Sky News.
Además, cerró el mes pasado la venta al austriaco Erste del 49% del capital de su filial polaca, Santander Polska, por 6.800 millones de euros. Al respecto, la cúpula directiva destacó que el mercado polaco es el que presentaba menor conectividad con el resto de sus negocios. Con su proceso One Transformation, en marcha desde 2023 y con el propósito de optimizar su escala global, Santander está buscando lograr un modelo único en sus mercados, entre varios países de Europa y de las Américas.