Jaime Botín ha salido de compras y se ha reforzado como el principal accionista de Línea Directa. Cartival, la sociedad instrumental del banquero, ha comprado cerca de 340.000 nuevas acciones de de la aseguradora entre los días 14 y 16 de noviembre, según consta en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El vehículo adquirió las acciones en diferentes operaciones entre los días 14 de noviembre y 16 de noviembre a un precio de entre 0,84 y 0,86 euros y con una inversión total de más de 287.000 euros. De esta manera, se refuerza como el mayor accionista de Línea Directa tras aglutinar un 19,18% del capital.
Tras Cartival, los principales accionistas continúan siendo Bankinter, que controla un 17,415%, y Masaveu, que es dueño de un 5,282%; seguidos por Norbel Inversiones (5,001%), Lazard Asset Management (3,195%) y Brandes Investment Partners (3,002%).
Las compras de Botín se producen tan solo unos días después de que Invesco reduciera prácticamente a cero su participación en Línea Directa tras pasar del 1,293% al 0,019%. Desde el pasado 23 de octubre, cuando controlaba en torno al 2,8%, la gestora ha ido reduciendo progresivamente el porcentaje que poseía en la aseguradora. El pasado miércoles 8 de noviembre bajó del 2,499% al 1,293%.
Desde que el financiero salió al mercado, las acciones de Línea Directa han subido un 1,31% hasta los 0,84 euros por título. Pese a los números verdes de esta semana, la acción está siendo muy castigada en el mercado y acumula un retroceso superior al 18% en lo que va de año.
Una caída que en parte se explica por las pérdidas que acumula. Entre enero y septiembre perdió 14,7 millones de euros debido al impacto en los márgenes de la compañía de la inflación de costes de prestación, que todavía sigue en "niveles elevados", según ha informado este viernes en un comunicado.
