
El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, volvió a mostrar el rechazo del banco al impuesto a la banca y la propuesta de prolongar su vigencia incluida en el pacto alcanzado por PSOE y Sumar para la investidura de Pedro Sánchez, durante la rueda de prensa de presentación de los resultados del tercer trimestre del año.
"Gravar más a la banca es pegarse un tiro en el pie de la economía" llegó a asegurar el ejecutivo del mayor banco por negocio en España, al valorar que es el sistema financiero español es el aparato circulatorio que permite que la financiación de todos los sectores económicos.
Más allá de los debates parlamentarios, Gortázar criticó que la propuesta de extender ese tributo "se basa en una hipótesis que no es cierta, no están cayendo resultados extraordinarios del cielo". El ejecutivo defendió que en el propio caso de CaixaBank, que anunció un beneficio neto de 3.659 millones de euros hasta septiembre, un 48,2% más, "quien diga que es un resultado extraordinario está ocultando una parte de la realidad", en alusión a es que se genera sobre unos fondos propios de 37.549 millones de euros y se reparte entre más de 600.000 accionistas.
El consejero delegado, que calificó los resultados de la entidad de "moderados y razonables", volvió a recordar que pese a la subida registrada en los últimos trimestres, su rentabilidad se sigue situando por debajo del coste de capital. Su rentabilidad sobre recursos propios (ROE) se sitúa en el 11,9% mientras que según señaló Gortázar los analistas sitúan el umbral para el sector entre el 13% y el 14%. También insistió en que pese a la fuerte subida en el último año el sector bancario español sigue estando por debajo de bancos de otros países como Estados Unidos. También recordó que entre 207 y 2009 el propio banco superaba el 15%.
Para reforzar su argumento sobre que esa elevada cifra de beneficios no supone unas ganancias desorbitadas, recordó que CaixaBank está entre las 5 mayores empresas por tamaño entre las 35 empresas del Ibex, pero por rentabilidad está en el puesto 24. "Puede haber un debate sobre gravar más a la banca, pero no argumentando que está teniendo resultados extraordinarios" insistió. "Que el sector atraiga capital nos permite financiar al resto de la economía", comentó.
También volvió a argumentar que este gravamen a la banca supone "un trato discriminatorio" y recordó que en muchas zonas de la España vaciada compiten con entidades como las cajas rurales, además de con bancos exteriores y entidades financieras no regulados. E incluso fue más allá al apuntar que penaliza a los propios inversores en la banca española, frente a los accionistas de bancos en otros países. "El impuesto a la banca es un impuesto a sus accionistas, al propio Frob, a la Fundación La Caixa y a los accionistas minoritarios", aseguró. "Si usted invierte en un banco francés no tiene esta penalización", añadió.
Jornada laboral y productividad
Gortázar también fue cuestionado sobre otra de las medidas incluidas en el acuerdo entre PSOE y Sumar, la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanas. En el caso de CaixaBank, explicó que el número de horas anuales que tenemos ya conlleva una jornada laboral ligeramente inferior a esas horas semanales, por lo que su introducción no tendría impacto en la entidad.
En cuanto al impacto sobre la economía española, subrayó que una medida así "tiene mucho que ver con la productividad. Si vamos a trabajar menos y vamos a ganar menos, vamos a bajar productividad. Si lo que queremos es trabajar menos pero no reducir ingresos, no nos quedará otra que mejorar la productividad".
Repsol y grandes empresas
Aunque Gortázar no quiso entrar a valorar la postura de Repsol, que ha planteado la posibilidad de llevar parte de sus inversiones en España a otros países si se mantiene el impuesto a las grandes energéticas, sí que defendió a las grandes empresas, precisamente por su aportación a la productividad.
"No podemos discriminar a las grandes empresas por serlo, porque vamos a perjudicar a la economía" recomendó tras recordar que la gran empresa es mucho más productiva que la pequeña y que España está un 28% por debajo de Alemania en productividad.