
El cambio de la política monetaria, con la subida de tipos para frenar la inflación, ha trasformado el balance de la banca, que ve un crecimiento del saldo en depósitos, tanto a nivel nacional como consolidados, por los movimientos de las empresas para conseguir una mayor rentabilidad de su liquidez. Las entidades cotizadas del país han incrementado el saldo de depósitos de clientes un 8,5% en España, hasta alcanzar los 1,17 billones de euros a cierre del tercer trimestre. A nivel global, el crecimiento ha sido similar, cercano al 9%, hasta los 2,13 billones de euros, especialmente por la gran diversificación tiene el Santander fuera de nuestras fronteras.
El incremento del saldo en depósitos se debe al trasvase de liquidez que están realizando las compañías desde otros instrumentos hacia los depósitos a plazo, que ahora son más rentables con la subida de los tipos de interés, según explican a este diario las fuentes financieras consultadas. Este movimiento de fondos se está dando en compañías y no en particulares, ya que las políticas de bonificación son distintas, explican las mismas fuentes. De hecho, los principales espadas de los grandes bancos del país han repetido en los últimos meses que descartan entrar en una guerra por los depósitos de particulares porque no necesitan captar más liquidez para financiarse (es decir, tienen ahorro suficiente para poder prestar).
El movimiento de fondos por parte de las compañías se ha dado especialmente en el último trimestre del año, acompañando la subida efectiva de los tipos de interés, con el primer movimiento al alza en julio. El incremento de las tasas por parte del Banco Central Europeo (BCE) para frenar la inflación ha dado una vuelta de 180 grados a la remuneración de la liquidez de las empresas. La banca ha pasado de cobrar a las compañías por tener depositada su liquidez o mantener a cero los tipos hasta el pasado mes de mayo a remunerar en septiembre hasta un 2,3% los depósitos a plazo entre uno y dos años (ver gráfico). Concretamente, el sector remunera de media los depósitos de las empresas a plazo a un 0,63% en septiembre, según los últimos datos del Banco de España. Aunque por tramos, por debajo de un año, la bonificación estaba en el 0,61%; entre un año y dos años, hasta el 2,3% y para más de dos años, en el 0,46%.
Los depósitos también crecen en la banca a nivel internacional puesto que varios mercados donde el sector tiene presencia, como EEUU, Brasil, México o Reino Unido, también han subido tipos, antes y a tasas mayores que en la zona euro para luchar contra contra la elevada inflación.