M&G Investments es una gestora con sede en el Reino Unido y es especialista en la inversión en renta fija, renta variable y multi-activos siendo fundadora del sector de fondos de inversión colectiva en el Reino Unido. Es la primera gestora inglesa que lanzó fondos retail y posee más de 80 años de experiencia en el mercado. Ocupa la primera posición de ventas brutas y netas minoristas durante 40 años consecutivos.

Marriott adquiere por 11.300 millones Starwood y crea de esta manera la mayor hotelera del mundo. La fusión sólo puede resultar beneficiosa para AC Hoteles, la socia en España de Marriott.

El fracaso cosechado por Artur Mas en las votaciones de investidura no desalienta al aún president para seguir buscando el apoyo de los radicales de la CUP. Ese afán de Mas ya ha dado frutos contrarios a toda lógica gestora, como un plan social que pone en riesgo de quiebra miles de concesiones de servicios básicos. No cabe esperar nada mejor de esta alianza; por ello, resulta comprensible que los consellers económicos vuelvan a alzar la voz y apoyen celebrar nuevas elecciones, antes que seguir claudicando ante un partido antisistema.

Dentro de la lógica aberrante del terrorismo, constituye una objetivo irrenunciable la distorsión de las costumbres más cotidianas de las personas a las que ataca. Viajar y hacer turismo se encuentran entre los hábitos preferidos de los ciudadanos occidentales y, por ello, no es casualidad que, más allá de las derivadas geopolíticas, el islamismo decidiera golpear en el corazón de la ciudad más visitada del mundo, París, y se ensañara en lugares de ocio: restaurantes, un estadio de fútbol o una sala de conciertos.

La compra de Starwood por parte de Marriott origina la mayor cadena hotelera del mundo, con 5.500 establecimientos que disponen de un millón de habitaciones en más de 100 países. La importancia de la fusión, con todo, va más allá de un aumento de la oferta. En el actual mercado, la competencia se multiplica por la irrupción de las viviendas particulares y del nicho de negocio descubierto por las tecnológicas como Google o Amazon. Resulta, así, fundamental que las cadenas tradicionales acentúen su identidad dirigiéndose a clientes cada vez más específicos.