
La compra de Starwood por parte de Marriott origina la mayor cadena hotelera del mundo, con 5.500 establecimientos que disponen de un millón de habitaciones en más de 100 países. La importancia de la fusión, con todo, va más allá de un aumento de la oferta. En el actual mercado, la competencia se multiplica por la irrupción de las viviendas particulares y del nicho de negocio descubierto por las tecnológicas como Google o Amazon. Resulta, así, fundamental que las cadenas tradicionales acentúen su identidad dirigiéndose a clientes cada vez más específicos.
Starwood dispone de 11 submarcas personalizadas; Marriott, de 19 bien posicionadas en el sector del lujo. Su unión implica una adaptación adecuada a un sector en el que las reglas del juego cambian.