Opinión
La industria de alimentos y bebidas en España está al borde de una nueva era definida por el papel creciente de la electricidad y la energía renovable. Con un consumo energético equivalente al 15,8% de la demanda manufacturera, ahora es el momento de tomar decisiones. La transición hacia la energía solar no es un capricho, sino un paso crítico y estratégico para las empresas que desean blindar su futuro y mantenerse competitivas en un entorno energético inestable y en constante evolución.