Con un escenario electoral incierto en Estados Unidos y el crecimiento en la economía de China sin remontar como protagonistas en el mes de julio, el petróleo ha ido disminuyendo su precio en este entorno, después de algunos meses de subidas en los que bailaba a ritmo de las tensiones geopolíticas globales. Ahora, y después de que se diera a conocer que los inventarios de crudo estadounidenses caen por cuarta semana consecutiva, el barril de Brent atraviesa su segundo mes más bajista en lo que va de año.