
El pasado 21 de abril le decíamos adiós a una de las figuras clave de la Iglesia Católica. El Papa Francisco nos dejaba a los 88 años tras varios meses entrando y saliendo del hospital por problemas de salud que terminaron agravándose. Ahora, los fieles aprovechan para estudiar su legado, sobre todo porque no fueron precisamente pocos los cambios que introdujo. Tras su nombramiento como sumo pontífice en 2013 Jorge Mario Bergoglio, el nombre que se escondía detrás de Francisco I, puso en marcha una serie de reformas administrativas para mejorar la transparencia del Vaticano, y varios españoles le acompañaron en el proceso.
En 2014 Francisco I tomó la decisión de crear la Secretaría para la Economía, un organismo encargado de supervisar y controlar las actividades económicas del Vaticano. Desde el primer momento estuvo dirigida por un español, el Padre Juan Antonio Guerrero, nombrado personalmente por el pontífice. Sin embargo, se vio obligado a renunciar a su puesto de prefecto por motivos de salud en noviembre de 2022, cuando le sustituyó otro conciudadano.
Hablamos de Maximino Caballero Ledo, un economista laico español de 65 años con dos hijos al que le precede una sólida carrera en el sector farmacéutico estadounidense y que es el actual Prefecto de la Secretaría de Asuntos Económicos de la Santa Sede.
Maximino Caballero Ledo nació en diciembre de 1959 en Mérida, provincia de Badajoz. Su formación comienza cuando se gradúa en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad Autónoma de Madrid y continúa con un máster en Administración de Empresas en Barcelona.
En 2020 se trasladó al Vaticano por primera vez
La experiencia que acumula Caballero Ledo no es precisamente escasa. Estuvo trabajando en Europa, Oriente Medio y África antes de trasladarse a Estados Unidos en 2007, donde ocupó varios cargos de responsabilidad en una farmacéutica.
No fue hasta 2020 que su vida dio un giro radical: el Papa Francisco le llamó para ocupar la Secretaría de Economía del Vaticano para ayudar a liderar una estructura conocida históricamente opaca. Así, tras la renuncia de Guerrero en 2022, se convirtió en Prefecto de la organización, pasando a dirigir las cuentas de la Santa Sede.
Desde entonces, ha dado su opinión sobre la reforma que quería llevar a cabo Francisco en varias ocasiones. En diciembre del año pasado, cuando condenó a una decena de funcionarios vaticanos por malversación de fondos y corrupción, se apresuró a decir que esta reforma era "difícil de implementar", sobre todo porque "se pide a los entes un cambio radical de algo que durante siglos han hecho de modo diferente".
Además, se enfrentaba a un reto que nunca se había imaginado, aunque reconoce que "poder colaborar con la Santa Sede al servicio del Santo Padre es un honor y una gran responsabilidad".
Empieza el cónclave
Este miércoles 7 de mayo da comienzo el cónclave que se encargará de nombrar al nuevo pontífice. Entre los favoritos suenan los nombres de Robert Sarah, originario de Guinea de 79 años, y Pietro Parolin, italiano de 70 años actual Secretario de Estado del Vaticano y cercano al Papa Francisco.
Otro de los nombres más sonados es el de Luis Antonio Tagle, un cardenal filipino al que muchos ya han bautizado como el "Francisco asiático" por ser muy afín a la línea de pensamiento de éste.
Relacionados
- La proteína que ha sorprendido a los científicos por aumentar la esperanza de vida en varios años: "Es clave para la longevidad"
- Quién es Robert Sarah, el cardenal más crítico con Francisco I que podría ser el primer Papa negro y marcar el rumbo de la Iglesia católica
- Aviso de Hacienda: empezará a multar a los que paguen en efectivo a partir de esta cantidad