
En el último tiempo, en Europa se han registrado varios casos de personas que sin quererlo se han encontrado con tesoros dentro de compras o en sus propias casas. En este escenario, uno de los hallazgos más notables se produjo en Alemania, donde un hombre de 29 años encontró un pequeño tesoro mientras limpiaba su casa.
Según cuenta Newsweek, esta sorprendente revelación ocurrió en Heidelberg, Alemania, donde el individuo entregó a la policía varios lingotes de oro y monedas, valorados en más de 147.000 euros.
El comunicado de la policía local, traducido del alemán al inglés, reveló que el joven había encontrado este abultado botín durante una jornada de limpieza. Lo que aún permanece en la incertidumbre es la identidad del propietario original de los objetos. En ese momento, las autoridades indicaron que, si se determinaba que no eran objetos robados, el afortunado que lo encontró podría esperar una generosa recompensa por "su honestidad".
El tesoro contaba con diversos lingotes de oro de diferentes pesos, mientras que la edad exacta de las barras de metal precioso permanece desconocida, las monedas que acompañaban al botín se fabricaron en la década de 1970. Un portavoz de la policía del estado de Baden-Württemberg destacó que aún no se ha presentado ninguna reclamación sobre la propiedad de estos objetos.
El proceso administrativo
La montaña de oro descubierto estaba vinculada con un proceso administrativo. Si en un plazo de seis meses no se identificaba al propietario original, el joven que encontró el tesoro podría quedarse con él, y fue lo que ocurrió. Este hecho generó gran expectación en la región, donde los habitantes especularon sobre la posibilidad de que otros tesoros se encuentren en sus hogares.
El interés por la búsqueda de tesoros no es nuevo en Alemania. En 2017, un tesoro celta de 2.000 años de antigüedad fue descubierto en Brandeburgo, despertando el interés de arqueólogos e historiadores. La ministra de cultura de Brandeburgo, Manja Schuele, destacó la importancia de este hallazgo, que consistía en 41 monedas de oro y que representaba un vistazo único a la historia celta en la región.