
De la noche a la mañana, el obrero y militar británico Nick Mead hizo un descubrimiento que cambiaría su vida por completo. En 2018, compró un tanque en eBay por aproximadamente 36.000 euros, en él encontró cinco lingotes de oro ocultos en su interior. Este hallazgo, que ascendía a un valor estimado de 2,5 millones de euros, ha sido objeto de interés y controversia durante los años siguientes, especialmente tras la decisión de Mead de devolver el tesoro a las autoridades.
Mead, de 62 años, se dedica a la restauración de tanques en su granja de Helmdon, Northamptonshire, Inglaterra. Su pasión por la historia militar lo llevó a hacerse con un tanque T-55, también conocido como Tipo 69, que había sido utilizado por el ejército iraquí durante la invasión de Kuwait en 1990. Este tanque, que quedó atrás tras la retirada de las tropas iraquíes, llevaba consigo un tesoro oculto que cambió la perspectiva de Mead sobre su compra.
El descubrimiento del oro ocurrió mientras él y su mecánico, Todd Chamberlain, realizaban trabajos de restauración en el tanque. La intención original era revisar el tanque de diésel por si contenía municiones, pero lo que encontraron fueron cinco lingotes de oro, cada uno con un peso de hasta 5 kg. La sorpresa fue monumental, y la pareja rápidamente se dio cuenta de que necesitaban actuar de manera responsable, así que decidieron llamar a la policía.
El arrepentimiento de hacer lo "correcto"
Aunque la entrega de los lingotes a las autoridades fue lo correcto desde el punto de vista legal y moral, Mead ha expresado su arrepentimiento al no recibir ninguna compensación por el hallazgo. En una entrevista con el Daily Mail, comentó: "No es como si pudieras llevar cinco lingotes de oro a la casa de empeños. Así que llamamos a la policía". Mead lamenta no haber recibido una comisión por el descubrimiento, lo que lo ha llevado a cuestionar su decisión de devolver el tesoro.
El trasfondo del oro es tan intrigante como su descubrimiento. Los restauradores creen que los lingotes fueron saqueados por soldados iraquíes durante la Guerra del Golfo, y que posteriormente el tanque fue capturado y llevado a Reino Unido. Aparentemente, los pilotos rellenaron el tanque de combustible con lingotes de oro, y su descubrimiento ha abierto un mundo de especulaciones sobre cómo y por qué terminaron allí.
A pesar de la fortuna que ha perdido, Nick continúa con su pasión por los vehículos militares. Dirige Tanks-a-Lot, donde ofrece a los entusiastas la oportunidad de experimentar la conducción de tanques en su granja. Aunque no recupere nada del oro, su amor por la historia militar y su colección de 150 vehículos le han proporcionado una satisfacción personal que va más allá de lo monetario.
Figura en el coleccionismo militar
A medida que los años pasan desde el descubrimiento, Mead se ha convertido en una figura reconocible dentro del mundo de los coleccionistas de vehículos militares. Su historia atrajo la atención tanto de la prensa como del público, resaltando las expectativas y desafíos que existen en un sector donde las piezas históricas pueden esconder secretos valiosos.
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