El hombre más rico del mundo, Elon Musk, ha vuelto a convertirse en noticia por su incursión en el mercado inmobiliario, específicamente en Austin, Texas. Lo sorprendente no es la compra de propiedades en si, sino el enfoque familiar que ha tomado en este proyecto. Según reporta el New York Times, Musk ha adquirido tres mansiones contiguas, aparentemente para establecer un complejo donde puedan vivir sus hijos y sus madres, un proyecto que sugiere un nuevo capítulo en la vida personal del magnate tecnológico.
Las propiedades adquiridas incluyen una mansión de 1.300 metros cuadrados que recuerda a una villa toscana, y una segunda residencia de seis habitaciones justo detrás de esta, con un costo combinado de aproximadamente 35 millones de dólares, 32 millones de euros al cambio. Para Musk, cuya fortuna asciende a 272.000 millones, esta cifra puede parecer un gasto menor. Sin embargo, la inquietud se cierne sobre qué tipo de tasa hipotecaria podría haber negociado, si es que optó por financiamiento alguno, un detalle poco común en las transacciones de una figura de su calibre.
El tercer inmueble es donde Musk se aloja cuando no está inmerso en sus múltiples negocios o participando activamente en la campaña del expresidente Donald Trump. El ejecutivo se ha destacado no solo como CEO de seis empresas, sino también como uno de los donantes más prominentes del partido republicano, lo que plantea preguntas sobre cómo gestiona su tiempo entre responsabilidades familiares y actividades políticas.
El complejo que busca construir no es solo un refugio personal. Según el New York Times, este proyecto refleja una fusión de sus ansiedades existenciales y su visión empresarial, al mismo tiempo que busca abordar la creciente preocupación por las tasas de natalidad y el futuro del planeta. Musk ha demostrado que su vida personal y profesional a menudo están entrelazadas, lo que provoca críticas sobre su papel como figura paterna en este nuevo esquema familiar.
Por el momento, sólo una de las madres de sus hijos, Shivon Zilis, ha establecido residencia en una de las mansiones junto a sus tres hijos. Grimes, madre de tres de sus hijos, está en una batalla por la custodia y no reside en el nuevo complejo, al igual que Justine Musk, su primera esposa y madre de cinco de sus hijos. Esto deja un interrogante sobre quién realmente habitará las propiedades y cómo se gestionarán las relaciones familiares en este entorno exclusivo.
Razones de vivir en Austin
La elección de Austin como el lugar para estas adquisiciones también tiene sus razones. Además de ser el hogar de varias de sus compañías, Musk ha sido un fuerte defensor de la ciudad, que se ha posicionado como un nuevo centro tecnológico. Sin embargo, la estrategia de adquisición no ha sido sencilla; se rumorea que ofreció a ciertos propietarios entre un 20% y un 70% por encima del valor de sus casas para asegurar las propiedades, lo que ha suscitado críticas sobre la ética de sus negociaciones.
A pesar de los planes ambiciosos de Musk, aún queda por verse cómo se concretará este complejo familiar. Los reportes indican que, hasta el momento, solo Zilis ha estado viviendo en una de las mansiones, mientras que la vida cotidiana de los vecinos ha comenzado a notar la presencia del magnate por la seguridad reforzada en los alrededores. Con cada movimiento de Musk, también surgen comentarios de quienes lo rodean, preguntándose si sus caprichos inmobiliarios se traducirán en un enfoque más profundamente personal o si serán solo otro ladrillo en el vasto imperio que ha construido.
