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El increíble hallazgo de un pescador tras 27 años en el fondo del océano: "Esto es mucho mejor que cualquier pez"

Buque de carga Tokio Express. / Foto: Wikipedia - Murgatroyd49

Las profundidades del mar y del océano están repletas de tesoros inimaginables, algunos de los cuales acaban por salir a la superficie, en la orilla del mar o en las redes de un pescador, que es lo que ha sucedido recientemente con un objeto muy curioso.

En concreto, el pescador británico Richard West consiguió un objeto de gran valor histórico cuando se encontraba surcando y trabajando a bordo de su barco pesquero en las aguas de la ciudad portuaria de Plymouth, en Devon. Este objeto podría tener un gran valor dinerario para los coleccionistas de este tipo de piezas.

Se trata de una pieza de Lego en forma de tiburón que pertenece, ni más ni menos, que a la colección que se encontraba en una de las cajas del buque Tokio Express, que naufragó en el año 1997, hace casi 30 años, cuando las miles de piezas de Lego que transportaba quedaron sumergidas y repartidas por todo el fondo marino.

Es mucho mejor que cualquier pez que haya atrapado toda la semana"

"Estoy tan feliz por esto... Es mucho mejor que cualquier pez que haya atrapado toda la semana", dijo incrédulo el pescador en declaraciones recogidas por la cuenta de Instagram Lego Lost At Sea (@legolostatsea), especializada, precisamente, en los hallazgos de estas piezas de Lego que aparecen de vez en cuando en el mar.

La cuenta de Instagram, que acumula más de 32.000 seguidores en estos momentos, muestra una foto del pescador con el hallazgo, recogiendo la incredulidad del capitán de su barco de pesca: "El capitán de buque Andrew Shaw, piensa que estoy loco por lo emocionado que me puse por encontrarlo", dijo West.

Concretamente, la historia de este buque, conocido como Tokio Express, data del 13 de febrero de 1997, cuando fue golpeado por una ola gigante, lo que provocó su naufragio y la pérdida de toda su carga, incluido un contenedor que tenía casi cinco millones de piezas de Lego.

De todos esos millones de piezas que quedaron en las profundidades marinas se han ido encontrando algunas de ellas, pero nunca se había hallado una que fuera en forma de tiburón, como es el caso del reciente hallazgo del pescador británico.

Eso sí, han aparecido otras piezas, como las de forma de pulpos, dragones, aletas y flores, todas ellas alrededor de las playas de las playas de Cornualles, al suroeste de Inglaterra, sobre todo, después de las tormentas, cuando las aguas aumentan su actividad y movimiento.

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