Pese a ser la principal cadena de alimentación en España y entre las más alabadas por sus clientes, Mercadona no está teniendo en las últimas semanas sus mejores días. Por la denuncia ante las medidas proteccionistas ante el aceite de girasol y otros productos cuya demanda se ha intensificado a causa de la guerra entre Rusia y Ucrania, el presidente, Juan Roig, ha salido a la palestra para defender su modelo de negocio y dar tranquilidad a los consumidores.
La semana pasada Facua y otras instituciones de defensa de los usuarios pusieron el foco sobre las últimas políticas llevadas a cabo por Mercadona, así como otros supermercados. Por el hecho de limitar las compras de aceite de girasol y subir sus precios así como los de sus derivados, Juan Roig no ha sido ajeno a la mala imagen que ha supuesto para la cadena valenciana estos días.
Por ello, en la rueda de prensa tras el balance anual de la compañía y las previsiones para 2022, el empresario ha querido salir al paso de los 'bulos' sobre el desabastecimiento. "Quiero garantizar que la cadena agroalimentaria española y portuguesa es muy fuerte. Problemas de falta de productos no va haber", ha señalado desde el centro de innovación Jarrods de Paterna (Valencia).
Mercadona garantiza el suministro como ocurrió con la pandemia
Comparando la actual situación de fiebre por el aceite de girasol con la que hubo con el papel higiénico al inicio de la pandemia, Roig ha mostrado que Mercadona está preparada para aguantar una demanda puntualmente fuerte que, sin embargo, no cambió el consumo anual. "Durante el confinamiento la compra de papel higiénico se multiplicó por dos, pero al final del año vendimos la misma cantidad que otros años", ha reflejado.
Unos niveles que espera que se manifiesten este 2022 con el aceite de girasol, aunque Roig ha querido poner el foco sobre el aceite de oliva donde España es el principal productor. "Consumimos tres veces menos aceite de oliva del que producimos. No hay ningún problema por la demanda", ha remarcado.
Roig critica al Gobierno por el IVA y las energías
Todo en un panorama donde la guerra ha obligado a Mercadona a tomar decisiones con el objetivo de mantener los beneficios que en 2021 repercutieron en 27.819 millones en ventas (un 3,3% más que en 2020). Adaptando los precios, que no subiéndolos, para lo que Roig ha pedido a las autoridades también esfuerzos.
Desde la constante de agilizar iniciativas empresariales, que se pierden en largos procesos burocráticos, el líder de Mercadona además, ha criticado que el Gobierno no haya modificado el sistema de fijación de los precios de la energía. "Que lo cambien mañana", ha sentenciado mientras también ha pedido limitar el IVA en un escenario de incremento de los costes que lleva a un escenario "inflacionista".
Todo en un ambiente donde Mercadona ha visto cómo los costes de las materias primas suponen un 28% más para la cadena y los transportes se elevan en 65 millones (la electricidad no subió al tener un contrato blindado), lo que ha derivado en una subida del 2% de los precios. Elevación muy por debajo del general en el sector de la alimentación, 5%, que para Roig sigue siendo muestra de la confianza en unos clientes a los que ahora el empresario les pide calma y prudencia.
