
Seguramente sea el primer sector que viene a la cabeza cuando se habla de tener buenas perspectivas de futuro. El tecnológico, en todas sus vertientes, no ha dejado de crecer en los últimos años.
En España en concreto durante la pandemia se llegó a ver cómo en ciudades como Madrid llegaban a copar el 23% de las ofertas de empleo, prácticamente uno de cada cuatro.
A ello se ha sumado que a su crecimiento y movilidad por parte de sus profesionales el teletrabajo ha permitido ahora que el foco de grandes oportunidades no se centralicen tanto en Madrid y Barcelona.
Ahora bien, ¿qué perfiles son los más demandados actualmente en este sector?
Sueldos de hasta 100.000 euros al año
Randstad Technologies ha llevado a cabo sus previsiones de las principales tendencias del sector de cara a este año 2022, señalando que los expertos en ciberseguridad, los analistas de datos, los desarrolladores de tecnología devops, los arquitectos y administradores de tecnología en la nube y los desarrolladores fullstack serán los perfiles más demandados en este curso.
Estos puestos tienen en común su alta empleabilidad, ya que existe cierta escasez de talento, es decir, los empleadores no logran encontrar con facilidad profesionales capacitados para estas posiciones, lo que supone que sean empleos con bandas salariales por encima del mercado.
Estas posiciones se caracterizan también por su transversalidad, es decir, son demandadas por empresas de cualquier sector, siempre y cuando utilicen este tipo de tecnología.
Experto en ciberseguridad
Son profesionales capaces de proteger los sistemas y las redes, el software, los datos y los sistemas de información de las compañías. Si ya eran profesionales muy demandados antes de la crisis, el teletrabajo ha acelerado la dependencia de estos perfiles. Se les requiere contar con una ingeniería técnica o superior en informática o grado de informática, además de formación específica en ciberseguridad, como máster o certificaciones oficiales.
Cuentan con conocimientos técnicos altos en infraestructura tecnológica, además de habilidades propias en el ámbito de la seguridad informática. Se mueven en una banda salarial de entre 50.000 y 100.000 euros anuales.
Analistas de datos
Se dedican a transformar cantidades de datos sin procesar en información procesada y, además, pueden trabajar con el dato creando modelos de información que permitan saber qué va a ocurrir. Precisan de una formación de ingeniería técnica o superior en informática o grado de informática, junto a estudios concretos superiores en data o bigdata.
Entre las habilidades más apreciadas está la capacidad de análisis, interpretación y predicción de los datos. Su banda salarial se encuentra entre los 45.000 y los 65.000 euros.
Desarrolladores de tecnología devops
Se encargan de diseñar y ejecutar esta tecnología, en estrecha alineación con los objetivos operativos de las organizaciones. Se les exige desde un ciclo formativo de grado medio o superior, hasta la ingeniería, técnica o superior, en informática.
Deben contar con una amplia experiencia en el desarrollo de software. Se les suele ofrecer un salario situado entre los 45.000 y los 65.000 euros al año.
Arquitectos y administradores de tecnología en la nube
Es un campo de conocimiento que permite diseñar arquitecturas y administrar los sistemas tradicionales de las organizaciones en nuevos entornos en la nube.
Para estas posiciones se requiere ingeniería técnica o superior en informática o grado de informática, además de una formación específica en las tecnologías de la nube, como un máster u otras certificaciones oficiales. La banca salarial en la que se encuentran se sitúa entre los 40.000 y los 60.000 euros.
Desarrollador fullstack
Son profesionales versátiles que desarrollan software, tanto en el Front End como en el Back End, con elevados conocimientos técnicos y cierta experiencia. Se demanda una formación que va desde un ciclo formativo de grado medio o superior, hasta la ingeniería, técnica o superior, en informática. El salario se suele situar entre los 30.000 y los 60.000 euros.
Según indican las tendencias de Randstad, a la hora de ofrecer condiciones de valor destinadas a fidelizar el talento, el sueldo sigue siendo un aspecto fundamental, aunque cada vez cobran mayor protagonismo otros factores como la flexibilidad, el ambiente de trabajo o la capacidad de conciliar la vida familiar con el entorno laboral, máxime tras la irrupción de la pandemia. La posibilidad de contar con el mejor talento dependerá de cada empresa y su capacidad de poner en marcha medidas de employer branding.