
En los últimos días, el Banco de España ha venido advirtiendo de que diferentes entidades bancarias han procedido a cobrar comisiones por la retirada de dinero en la ventanilla de sus oficinas. Un hecho que ha sido alertado por Facua, hasta el punto de solicitar al Gobierno que ordene la retirada de estos cargos por algo que considera que perjudica a los clientes más vulnerables.
Pese a que el dinero en efectivo prosigue su caída en favor de las tarjetas y pagos telemáticos, todavía hay muchos colectivos que siguen prefiriendo el 'cash' para pagar sus operaciones. Más si cabe en los grupos más vulnerables, que no terminan de adaptarse a los nuevos medios por su edad, discapacidad o por la brecha digital, estos son precisamente los que más se están viendo golpeados por una de las medidas más polémicas que han sacado adelante las entidades en los últimos meses.
El cobro de comisiones por retirar dinero en efectivo en ventanilla, no así en cajeros, Facua considera que "no procede, ya que esta operación forma parte de las prestaciones más elementales de cualquier cuenta de pago". Por ello, se ha dirigido al ministro de Consumo, Alberto Garzón, y a la ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, para instarles que prohíban tal cobro a los usuarios vulnerables.
En el código de buenas prácticas del Banco de España ya se alertaba que este cobro iba a perjudicar a los grupos más vulnerables
Un asunto que va en línea del aviso del Banco de España, quien ya elaboró un código de buenas prácticas por el que las entidades deben poner "a disposición de sus clientes al menos un medio gratuito, accesible y seguro para que puedan disponer de efectivo de su cuenta". Además, se advirtió que de generalizar el cobro de la comisión, "podría ser una traba para algunos sectores de la población, como, por ejemplo, las personas mayores o poco familiarizadas con las tecnologías".
Hechos que se suman a los fijados por varios Reales Decretos de protección al consumidor, que dan más que soportes a la institución para elevar tal demanda. Todo con el fin de no perjudicar a los clientes más vulnerables y que ven en la retirada de efectivo en ventanilla la forma más cómoda ante las nuevas tecnologías que van en dirección contraria.