Las provincias de Barcelona, Madrid y Málaga concentraron la mayoría de las 'golden visa' concedidas a los extranjeros no comunitarios por comprar una vivienda en 2022. Así lo recoge el Gobierno en una respuesta parlamentaria de Ciudadanos en la que cifra en 476 el total de visados de este tipo otorgados el año pasado.
En cuanto al origen de los compradores de vivienda, y según los datos del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación facilitados a elEconomista.es, la mayoría procedieron de China. También tuvieron un peso significativo los ciudadanos de Filipinas y Reino Unido. De hecho, entre la tres nacionalidades concentraron el 70% de los permisos de residencia otorgados. Por detrás se situaron los rusos, que antes del veto recibieron nueve visados, seguido de los compradores de Kazajstan, Venezuela, Argelia o Estados Unidos.
Veto a Rusia
El Gobierno de España acordó en marzo de 2022 suspender la concesión de visados de residencia a los inversores y emprendedores rusos. La medida, que afecta a todos los ciudadanos de dicha nacionalidad independientemente de su relación con las autoridades del país, se tomó en respuesta a la invasión de Ucrania.
En 2021 adquirieron 157 viviendas con un valor igual o superior a los 500.000 euros en todo el territorio español, según datos del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación. La cifra se reduce a 74 en 2020 y a 44 en 2019.
¿Cómo funciona?
El visado de residencia para los ciudadanos extracomunitarios, conocido popularmente como 'golden visa', fue aprobado en 2013 por el Gobierno de Mariano Rajoy. Está recogido en la Ley 14/2013, de 27 de septiembre, de apoyo a los emprendedores y su internacionalización, y permite a los ciudadanos no europeos residir en España a cambio de hacer grandes inversiones.
En el caso del mercado inmobiliario, el permiso se consigue a cambio de comprar bienes inmuebles por un valor igual o superior a los 500.000 euros. El tiempo de residencia tiene un plazo de dos años, pero se puede ampliar por periodos de cinco años.
El demandante de la 'golden visa' debe acreditar la compra del inmueble presentado una certificación registral de dominio y cargas emitida por el Registro de la Propiedad y, entre otras cosas, acreditar que dispone de la inversión libre de toda carga o gravamen. En el supuesto de que la compra del inmueble no se haya formalizado, tendrá que presentar un precontrato de garantía junto con un certificado de una entidad financiera establecida en España.
El visado de residencia también se puede conseguir realizando una inversión inicial por un valor igual o superior a dos millones de euros en títulos de deuda pública, o por la misma cantidad o superior a un millón de euros en acciones o participaciones sociales de empresas españolas, o depósitos bancarios en entidades financieras del país.
También podrán solicitar el visado aquellas personas que pongan en marcha un proyecto empresarial que vaya a desarrollarse en territorio nacional y que sea considerado y acreditado como de interés general. Este tipo de inversión es minoritaria; de hecho, solo se concedieron ocho visados de residencia por esta vía durante 2022.