
La inmobiliaria Vonovia, que gestiona casi medio millón de viviendas en alquiler en Alemania, ha anunciado que bajará la calefacción a sus inquilinos por la noche a 17 grados para rebajar el coste energético. El país se enfrenta a una profunda crisis energética por los recortes en el suministro de gas por parte de Rusia.
La medida de calefacción reducida se implementará gradualmente durante los próximos meses y se aplicará a la totalidad de inmuebles a principios de otoño. La compañía pretende ahorrar hasta un 8% en los costes de calefacción.
Los inquilinos ya pagan una cantidad mensual fija por calefacción basada en una estimación anual. Al final de cada año, la compañía puede solicitar dinero adicional a los inquilinos o pagar un reembolso, según el consumo real y el coste.
Las facturas de calefacción vertiginosas, como reflejo de las manifestaciones mundiales y la escasez debido a la crisis de Ucrania, podrían significar que los inquilinos reciban facturas gigantescas a principios del próximo año.
Vonovia, que tiene el 55% de su sistema de calefacción abastecido por gas, dijo que estaba informando a los inquilinos que los altos precios de la energía conducirán a mayores pagos adicionales en el futuro.
El mes pasado, el presidente ejecutivo de Vonovia, Rolf Buch, dijo que esperaba que el aumento de los precios de la energía costara a los inquilinos el equivalente a hasta dos meses de alquiler.
Alemania pasó el mes pasado a la etapa dos de su plan de gas de emergencia de tres niveles después de que Rusia redujera las entregas a través del gasoducto Nord Stream 1, un paso antes de que el gobierno comience a racionar el consumo de combustible.