
Vueling ha dado por superada su crisis aérea de 2016 y ya tiene la vista puesta en volver a crecer a doble dígito. Tras un año de cierre de rutas y mejora de los sistemas operativos, el presidente de la compañía de bajo coste, Javier Sánchez-Prieto, ha anunciado que ya está lista para crecer a un ritmo del 10% anual en los próximos cinco años, dejando atrás el incremento del 2,1% de 2017. "Vueling ha cambiado. En un año, el equipo ha trabajado duro y ha conseguido preparar a la compañía para la nueva fase de desarrollo", aseguró en este sentido el presidente de la aerolínea catalana en un encuentro con este diario tras la presentación en Esade del plan estratégico 2018-2022.
Para alcanzar este objetivo, Vueling prevé incorporar 40 aviones a su flota, hasta sumar 150 aeronaves en 2022 y reforzarse en El Prat, donde tiene un 40% de la cuota de mercado, y en otras ciudades como Palma o Bilbao. "En un año en el que a nosotros nos está yendo bien, a otras compañías no les va bien y vemos oportunidades. Hay firmas que están retirando capacidad de El Prat y nosotros la estamos incrementando. A su vez, hay otras que están quebrando en Palma de Mallorca y en el centro de Europa y nosotros tratamos de crecer ahí", relató Sánchez-Prieto.
Así, y siempre según las cifras presentadas en el plan estratégico, Vueling va a elevar este verano un 12,4% su oferta en El Prat, donde tendrá 52 aviones basados y volará a 130 destinos; en Bilbao prevé crecer un 24% este verano, abrir dos rutas e incorporar un avión a la base. Por último, en Palma de Mallorca, aprovechando la caída de Air Berlin, ampliará su oferta el 27%, abrirá cuatro rutas, una de ellas con Düsseldorf y otra con Viena, y tendrá cuatro aviones.
Y es que, la firma tiene un especial interés en abrirse un hueco en el mercado alemán y el austriaco potenciando las conexiones con la isla balear. De momento, tienen sobre la mesa un plan de crecimiento orgánico, pero Sánchez-Prieto ha explicado a este diario que desde IAG ya se está trabajando en un nuevo proyecto para mejorar la presencia del holding en Centro Europa desde este verano. "En seis u ocho semanas anunciaremos algo relacionado con una mejor presencia del grupo en ese mercado. Estamos discutiendo cuál será el mejor vehículo para hacerlo", sentenció.
Así, y después del traspiés en la compra de la aerolínea Niki por causas judiciales, Vueling reconoce que IAG está analizando otras opciones para crecer en la región, como crear una compañía, que no pasan necesariamente por ella. "Se está trabajado en varias opciones como montar una nueva firma... o simplemente que las aerolíneas que operemos ahí incrementemos nuestra presencia de forma orgánica. Para verano tendremos algo distinto", aseguró.
Más allá de Alemania, Vueling tiene en el punto de mira reforzarse en París, donde afronta el reto de alimentar los vuelos de Level, y de ganar peso en Roma donde llevan un año registrando muy buenos datos gracias a la mejora de la operación y la crisis de Alitalia. "La incertidumbre en torno al futuro de la compañía italiana, unido a sus problemas para crecer han beneficiado a Vueling. Estamos viendo más oportunidades", dijo Prieto.
No se mudará a Gerona
En cuanto a los planes de Fomento para convertir Gerona en la cuarta pista de El Prat, Sánchez-Prieto se muestra equidistante. El directivo ha señalado que es positivo que el Gobierno tome conciencia de la necesidad de reforzar la capacidad de El Prat, pero asegura que eso sólo se conseguirá aumentando el número de operaciones por hora, que ahora están restringidas por las limitaciones medioambientales. A su vez, ha descartado que sea "eficiente y operativo" que Vueling traslade parte de su operativa al aeropuerto de Gerona. "Creo que hay aerolíneas más pequeñas que pueden mover ahí toda su operación y ser más eficientes", aseveró.