Bilbao
El cambio accionarial en Talgo con la inminente entrada del consorcio vasco liderado por Sidenor, en el que también participa el Gobierno vasco y las fundaciones Vital y BBK, sigue postergándose y es por eso que en el Consejo de Gobierno celebrado hoy en Vitoria, el lehendakari, Imanol Pradales, ha sido nuevamente preguntado por cuándo se producirá la fecha definitiva para el cierre de la operación.
"Yo creo que estamos cerca ya de que se cierre definitivamente esa operación", ha reiterado, si bien no se ha ceñido a ningún calendario concreto, aunque se ha mostrado "optimista" y ha asegurado que el acuerdo de compraventa con el fondo Trilantic "sigue en vigor".
Lo que sí ha admitido es que cerrar la 'operación Talgo' está siendo "mucho más complicado" de lo esperado. Así, El lehendakari ha señalado que pensaba que el proceso "iba a ser más sencillo" por "las conversaciones previas que se habían mantenido a todos los niveles institucionales y también privados".
También ha hecho referencia a la multa de 116 millones impuesta por Renfe y ha reconocido que pensaron que se podía gestionar "con otra celeridad" pero, "está siendo mucho más complicado porque legalmente no se puede quitar algo que cuenta con todos los informes justificativos para que se aplique".
Además, al impactar directamente en las cuentas de la compañía, considera necesario "ver cómo se fortalece el balance, cómo se activan nuevas fuentes de financiación para hacer frente a todo el marco de pedidos que se ha ido conociendo públicamente respecto a Talgo de cara a futuro, y también nuevas capacidades industriales que derivarían de esa mayor producción de la compañía".
"Hay que hacer un conjunto de operaciones que tienen que integrarse para que, no solo Talgo tenga control desde el punto de vista de un consorcio vasco en términos de propiedad, sino que tenga futuro, y futuro industrial", ha destacado.
"Buen" clima de diálogo
En este sentido, el lehendakari ha recordado que hay tres ministerios "implicados" en esta operación, lo que denota su complejidad, pero según ha explicado trabaja con el Gobierno español "en un buen clima de diálogo y de colaboración" para "buscar las fórmulas que permitan activar la financiación bancaria suficiente para que Talgo pueda seguir operando, para que en términos de balance su impacto sea limitado y para que se produzca y se ejecute definitivamente el acuerdo de compraventa".