El Gobierno Vasco confía en que la venta de Talgo se concrete "próximamente", aunque no descarta modificaciones en las condiciones del preacuerdo debido a la caída en la cotización de la empresa y la posible participación de la SEPI en la operación.
El consejero vasco de Hacienda y Finanzas, Noël d'Anjou, señaló tras el Consejo de Gobierno de este martes que las condiciones del preacuerdo podrían variar: "No afirmo que vayan a cambiar, pero es una posibilidad, incluida la incorporación de la SEPI". D'Anjou destacó que la multa de 116 millones de euros impuesta por Renfe a Talgo, por retrasos en la entrega de trenes, "afecta la refinanciación de la deuda, un aspecto clave por resolver".
Fuentes cercanas al proceso indicaron a EFE que las negociaciones, estancadas por la financiación, se reactivaron tras la posible entrada de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). Pese a los retrasos, el consejero reafirmó el compromiso del Gobierno Vasco: "La operación está próxima a cerrarse. Es complicado precisar una fecha exacta, pero las condiciones para finalizarla en breve están avanzando. No habló de un cierre inmediato, sino próximo".
El 14 de febrero se alcanzó un principio de acuerdo para vender el 29,77% de Talgo, en manos del fondo Trilantic, al consorcio vasco liderado por Sidenor, con participación del fondo público vasco Finkatuz y las fundaciones Vital y BBK. El acuerdo establece la venta del 29,77% a cinco euros por acción (4,15 euros fijos y 0,85 euros condicionados a hitos financieros en 2027 y 2028). Sin embargo, en la actualidad la acción cotiza alrededor de 3,2 euros.
Tal y como adelantó elEconomista.es, el Gobierno ha decidido intervenir de manera decisiva para facilitar la venta de Talgo mediante un préstamo convertible de la SEPI de 150 millones de euros, que fortalecerá el patrimonio de la compañía y aliviará la presión de la multa de 116 millones impuesta por Renfe.
Este crédito, con intereses altos y carácter subordinado, permitirá a Talgo cumplir ratios financieros y mantener su competitividad en concursos de alta velocidad. La sanción de Renfe se aplazará hasta 2031, con pago fraccionado en siete años, vinculado a compromisos de suministro y conforme a lo sugerido por la Abogacía del Estado.
La operación, que implica la adquisición del 29,77% de Talgo por el consorcio vasco liderado por Sidenor por 153 millones de euros, sigue pendiente de refinanciar 400 millones de deuda con bancos acreedores. La intervención, diseñada para evitar que se considere ayuda de Estado, cuenta con el respaldo del Gobierno central y el PNV, y busca garantizar el control nacional de Talgo frente a ofertas extranjeras.