El Fondo Polaco de Desarrollo (PFR), máximo accionista del fabricante de trenes Pesa, ha lanzado un comunicado en el que asegura haber informado a la dirección de Talgo y a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) su intención de presentar una oferta pública de adquisición (opa) por el 100% del capital del fabricante de trenes, sin definir detalles concretos sobre el importe. La CNMV no ha notificado hasta el momento la recepción de esta petición. Se abre así la puerta a una guerra de opas frente a la adquisición parcial ya formulada por Sidenor para adquirir el 29,8% de la industria ferroviaria española a cambio de 177 millones de euros.
En el texto remitido al regulador bursátil, PFR anuncia su intención de presentar una propuesta "en los próximos días", dentro del proceso de venta organizado por Pegaso Transportation, la sociedad instrumental que ostenta la mayoría del capital de Talgo y que está formada por el fondo Trilantic y las familias Abelló y Oriol. Este período para presentar ofertas llega a su fin el próximo viernes, 14 de febrero.
La oferta, que será por la totalidad de las acciones de la compañía, estará "sujeta a diferentes condiciones". Pero Pesa sigue sin cerrar la puerta a la entrada a "un potencial coinversor minoritario", en referencia a Sidenor y el resto del consorcio vasco, para cumplir las exigencias del Gobierno de España de mantener la empresa en manos de accionistas nacionales.
De hecho, PFR asegura que "entiende la importancia, para Talgo y para España, de mantener su españolidad", por lo que se abre a mantener la sede de la compañía en suelo español, así como su capacidad industrial y su condición de empresa cotizada.
Además, abre la puerta a que el Gobierno Vasco también participe en la transacción alegando que "reconoce la relevancia de las raíces vascas de la compañía", para lo cual "buscará una colaboración fructífera con la comunidad del País Vasco tras la posible transacción".
El fondo Polaco, gestionado por su Ejecutivo Nacional, trata de convencer a los accionistas actuales de que su movimiento permitiría crear "un atractivo proyecto europeo de consolidación industrial", tanto para la empresa como para España. Lo haría de la mano de Pesa, el mayor fabricante de material rodante ferroviario de Polonia, y que es propiedad del PFR.
En concreto, apelan a la complementariedad entre ambas empresas, cuyas carteras complementarias y la tecnología única de Talgo "encajan perfectamente". Detrás de esto están las pretensiones de Polonia de disponer de material de ancho variable para desarrollar las conexiones ferroviarias con su vecina Ucrania.
"Pesa está especializada en locomotoras, tranvías y vehículos regionales e interregionales, mientras que Talgo es una empresa líder en diseño, fabricación y mantenimiento de trenes de alta velocidad. La combinación complementaria de los portafolios de ambas compañías daría lugar a un líder europeo con una amplia gama de productos y experiencia en la mayoría de mercados de la UE", explican desde PFR.
Asimismo, con el objetivo de dar respuesta a la falta de espacio productivo de Talgo, PFR propone hacer uso de las instalaciones de Pesa para ampliar de manera "inmediata" su capacidad industrial, al tiempo que se mantiene su carga de trabajo actual en España.
Polonia, que se erige como un potencial accionista "de largo plazo y estable", defiende la creación de valor en la empresa española "aumentando la escala del negocio". Para ello, ofrece la experiencia de Pesa en "homologaciones y ventas" para "ayudar a Talgo a dirigirse a un mercado más amplio y expandirse hacia Europa central y Oriental, donde se esperan importantes inversiones en la alta velocidad".
Más allá de la tecnología de cambio de ancho de vía, Polonia pretende que los trenes que circulen por su flamante y nueva red ferroviaria estén desarrollados en su propio país. Para ello, Talgo y Pesa firmaron en septiembre un memorando de entendimiento que permitiera fabricar conjuntamente esas unidades.