Valencia
Ni siquiera Óscar Puente, que ha sido un ejemplo de celeridad a la hora de acometer las obras de urgencia en las infraestructuras destrozadas por la DANA en Valencia, es capaz de asegurar los plazos del proyecto de unir las tres capitales de la Comunidad Valenciana con un tren de alta velocidad. El ministro anunció ese AVE como una novedad para 2027, pese a que su antecesora Raquel Sánchez le había puesto como fecha un año antes, 2026.
Como todo el Corredor Mediterráneo, no es el primer retraso que acumula el que se bautizó como AVE regional valenciano allá por el año 2002, cuando se anunció por primera vez su puesta en marcha. Según el plazo anunciado entonces por un Gobierno del PP, la línea de alta velocidad entre Valencia y Alicante llevaría en funcionamiento una década, desde 2015.
Desde entonces y con distintos responsables al frente de un Ministerio que en ese tiempo también ha cambiado de nombre, se pusieron como plazos los años 2017, 2020 y 2024 en sucesivas visitas y reuniones de varios ministros: Ana Pastor, José Luis Ábalos y Raquel Sánchez. En 2023 la titular socialista a la que sucedió Puente lo retrasó hasta 2026, según reflejan las hemerotecas que pocos consultan.
El ministro de Transportes no dudó en asegurar esta mañana en Castellón que "en 2027 toda la Comunitat Valenciana estará vertebrada por la alta velocidad y eso va a permitir crear un AVE regional valenciano" entre Castellón de la Plana, Valencia y Alicante, volviendo a anunciar un servicio que lleva décadas en la cartera de su Ministerio.
Más paradas
Durante un desayuno empresarial organizado por el periódico Mediterráneo, ha detallado que este "AVE regional valenciano" tendrá paradas en Xàtiva (Valencia), Villena (Alicante), en Orihuela (Alicante), Elche (Alicante) o en Sagunt (Valencia).
El ministro también ha señalado que en 2027 "de Almería a la frontera francesa se irá en alta velocidad", algo que su antecesora también había anunciado para el año 2026.
Lo cierto es que el principal problema para culminar esa conexión, cuando ya las tres capitales regionales tienen alta velocidad con Madrid, es la finalización de las obras del nodo de La Encina, en el interior de Alicante, y su conexión con ancho europeo con Valencia. Una obra que está en marcha pero tras numerosos retrasos y a pesar de las continuas reclamaciones empresariales.
Puente detalló que este año 2025 estará lista la segunda vía en ancho mixto (internacional e ibérico) entre Valencia y Castellón, mientras que las obras de la línea de alta velocidad Valencia–La Encina podrán estar finalizadas dentro de año y medio. Por su parte, en Alicante, hace pocas semanas fueron adjudicadas las obras para crear seis nuevas vías en ancho internacional, cuya previsión es que estén listas a mitad de 2026.
Según Puente, en el caso de la Comunidad Valenciana, por sus características, "el AVE va a poder hacer paradas que nos van a permitir jugar con un AVE de carácter regional que funcione a modo de lanzadera de uno a otro extremo de la Comunitat y que permita, no solo las conexiones de media y larga distancia, sino las conexiones intracomunitarias".
Tercer carril de la AP-7 en Castellón
Puente explicó que el Consejo de Ministros aprobará próximamente una inversión de 32,5 millones para mejorar los accesos de la N-340 en Oropesa, cuya licitación se prevé en este primer semestre en 2025, y que en breve, comenzarán las obras para adecuar al paso de peatones y bicis en 13 kilómetros de carreteras en Vinaròs, por 7 millones de euros.
También en pocos meses se aprobará el proyecto para construir un tercer carril en la AP-7 para mejorar la funcionalidad y la capacidad de la vía en Castellón, con una inversión de 50 millones de euros.
Además, se avanza en las obras de la carretera N-232, entre Morella y la Masía de la Torreta, con 20 millones de euros para completar el último tramo que quedaba para acondicionar esta vía de conexión con Teruel.