Empresarios alaveses piden a Sánchez y Pradales que impidan que Talgo pierda su 'españolidad'

Los empresariales alaveses han solicitado a diferentes dirigentes políticos e institucionales que apoyen la iniciativa de Sidenor para entrar en el capital de Talgo, ante la noticia de que Pesa, compañía propiedad de la SEPI polaca, esté interesada en comprar el fabricante ferroviario.

Según ha podido conocer elEconomista.es, el propio presidente de SEA-Empresas Alavesas, Juan Antonio Sánchez Corchero, se ha dirigido vía epistolar al lehendakari, Imanol Pradales y al presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, entre otros, para alertar sobre el riesgo para las empresas proveedores y miles de empleos, caso de que Talgo acabe finalmente en manos extranjeras.

No es la primera vez que Euskadi vive una situación similar con una empresa estratégica, con lo que ello supone de pérdida económica para su red de proveedores, sus plantas productivas y los empleos que ellos generan.

Por esta razón, ante el mutismo que existe por parte de Trilantic, fondo propietario del 30% de Talgo, sobre la oferta lanzada por Sidenor para entrar en el capital del fabricante ferroviario, y el renacer de la posibilidad de que la compañía, con sede social y fiscal en Madrid, pero de origen vasco y con una planta productiva en Rivabellosa (Álava), acabe en manos extranjeras, los empresarios alaveses han decidido alzar su voz.

Así, el presidente de SEA Empresas Alavesas, Juan Antonio Sánchez Corchero, se ha dirigido -en nombre de los empresarios y de la Cámara de Comercio de Álava- a los principales dirigentes institucionales españoles mediante una carta para trasladar "nuestra enorme preocupación por los recientes rumores de la entrada de capital polaco en Talgo y las pésimas consecuencias que esto supone para Álava y para toda Euskadi".

Así, el directivo recuerda que Talgo es una empresa tractora esencial para el tejido industrial, "ya que somos más de 400 los proveedores vascos donde trabajamos más de 5.000 personas".

"La noticia de que Pesa, una empresa propiedad de la SEPI polaca, es decir, con capital 100% público, está interesada en comprar Talgo nos ha puesto en estado de alarma. Y nos preocupa especialmente por dos motivos: primero, perderíamos la sede y su fuerza en Álava, y, en segundo lugar, pondría en riesgo toda su capacidad de compra actual en el entorno", explica Sánchez Corchero, quien asegura que "es una grave amenaza a nuestro futuro. Pero no tiene por qué ser así obligatoriamente".

En este sentido, el presidente de SEA comenta que "hay encima de la mesa, desde hace meses, la oferta de una empresa vasca, Sidenor. Una oferta industrial y con posibilidades de hacer un proyecto de futuro que impulse y desarrolle la actividad de las más de 400 empresas proveedoras vascas".

Así, Juan Antonio Sánchez Corchero finaliza su misiva pidiendo al presidente Pedro Sánchez, al lehendakari, Imanol Pradales, al diputado General de Álava, Ramiro González, y a responsables nacionales y vascos de Industria, "que hablen para impedir esta operación y la compra de una empresa esencial y estratégica para Euskadi, y evitar convertirla en una empresa polaca con todo lo que eso supone para todos".