Los sitios de Galicia que hay que visitar: desde un pueblo que parece sacado de 'El Señor de los Anillos' a playas paradisíacas

El norte de España presenta rincones únicos llenos de contraste, ya seas más de playa o de montaña hay una opción que se ajusta a tus gustos. Galicia es una de las joyas que destaca por sus impresionantes playas y sus encantadores pueblos, algunos incluso han llegado a ser inmortalizados en la gran pantalla. Por esto y mucho más, el norte está consiguiendo gran popularidad haciéndose así con un turismo tanto nacional como internacional. En un tren, mostrando uno de los paisajes más bonitos de Europa, o sumergiéndote en una tierra que nada tiene que envidiar al mágico reino de Arendelle en Frozen.

Si tu siguiente parada va a ser concretamente a la Terra Meiga, de costumbres, historias, leyendas y mitos, ya sea para disfrutar de unos días o hacer una pequeña escapada, aquí tienes una serie de opciones que te pueden interesar.

Castillo de Narahío (A Coruña)

Uno de los castillos más encantadores de la campiña gallega que ha conseguido buena parte de su fama por su entorno rural y por estar rodeado de verdes campos. Concretamente se encuentra en el municipio de San Sadurniño, un rincón poco conocido, pero que enamora a todos los que lo visitan. El Castillo de Narahío tiene una historia que se remonta a la Edad Media y, aunque su nombre no sobresale, su arquitectura y su ubicación ofrecen un buen ejemplo de las fortificaciones medievales que todavía existen en Galicia.

La entrada al castillo es gratuita, pero también se puede optar por hacer un free tour y dejar al guía una cantidad simbólica en proporción a su desempeño a la hora de hablar de su historia y arquitectura medieval.

Hay varias opciones de alojamiento en el municipio de San Sadurniño, incluyendo casas rurales y pequeños hoteles. Alternativamente, puedes buscar alojamiento en la ciudad cercana de Ferrol, que ofrece una gama más amplia de posibilidades.

Redes (A Coruña)

Redes es un pequeño pueblo costero con un paisaje encantador que combina mar, playas y un entorno natural verde. La playa de Redes, donde radica la popularidad de esta localidad, es conocida por su belleza de arena blanca y fina, y por su puerto pintoresco pesquero. No es de extrañar que Redes, al igual que otros muchos puntos de Galicia, destaque en su gastronomía local centrada en mariscos y pescado.

Lo mejor para disfrutar de esta parte de España es con vehículo propio, o bien alquilando uno. De esta manera podrás moverte con fluidez por los pueblos de la zona y alojarte en este pueblecito o directamente trasladarte a Ferrol, ciudad que apenas está a unos 30 minutos en coche.

No son pocas las actividades disponibles para hacer en pleno contacto con la naturaleza, desde rutas de senderismo ha piragüismo por el río para los más aventureros. La entrada al parque es gratuita, pero tanto el monasterio como el alquiler de canoa tienen un coste que puede variar dependiendo de si es temporada alta o no.

Hay opciones de alojamiento en los alrededores del parque, incluyendo casas rurales y pequeños hoteles en las localidades cercanas como Pontedeume o Monzo.

Carnota (A Coruña)

Otro de los puntos de la Costa Atlántica que destaca por sus impresionantes playas paradisíacas de arena fina, dunas y áreas naturales protegidas, así como su característico hórreo, el más largo de toda Galicia. Este hórreo de Carnota es un emblema de la arquitectura tradicional gallega, antiguamente se empleaba para conservar comida y evitar la humedad, pero ahora es más una atracción turística por su gran tamaño.

Fogar de Breogán (Pontevedra)

Se trata de un restaurante que destaca por la calidad de sus platos de gastronomía local. Sin embargo, su encanto no se limita a su servicio ni a sus platos, sino que podría ser la casa de un hobbit. En marzo de 2020 el restaurante sufrió un incendio que terminó por destrozarlo. En ese momento, lejos de hundir al dueño del establecimiento, comenzó un proceso de remodelación que terminó con unas adorables casa bajas integradas en una colina que parecen sacadas de El Señor de los Anillos. Aunque esta no fuese la intención del propietario, quien solo quería integrar su nuevo restaurante con la naturaleza empleando materiales ignífugos (debido a su mala experiencia con el incendio), se ha quedado un paisaje increíble que te hará creer que estás en una película... o en Nueva Zelanda.

Además, este lugar tiene una parte de posada, por lo que los clientes pueden reservar una noche entre sus muros, una habitación que puede salir por 100 euros la noche.

Combarro (Pontevedra)

Combarro es conocido por su casco antiguo pintoresco con hórreos y cruceiros, y por su ubicación junto a la ría de Pontevedra. El pueblo ofrece vistas espectaculares al agua y una arquitectura tradicional bien conservada. También es famoso por sus hórreos, que están situados en primera línea de mar, y por su arquitectura popular gallega.

Ribadavia (Ourense)

Ribadavia está situada en la región vinícola de Galicia, con un paisaje que incluye viñedos y el río Avia. Una opción algo distinta al resto ya que sitúa al vino en el centro. Su casco antiguo es otro de los puntos dignos de ver, ya que está bien conservado y ofrece una mezcla de arquitectura medieval y renacentista. Además, el castillo y la plaza de la Madalena son rincones únicos dignos de ver y que no te puedes perder.

Fervenza da Xestosa (Lugo)

Por último está esta opción estrechamente relacionada con la naturaleza, y los increíbles paisajes que caracterizan a Galicia. Se trata de una cascada espectacular en un entorno rodeado por bosques y montañas

Esta cascada es una de las más bonitas de Galicia y forma parte de una serie de rutas de senderismo en la región. Aproximadamente se tarda dos horas a pie (ida y vuelta). Es de nivel fácil y una de las mejores épocas del año para hacerla es en verano, para disfrutar de un buen chapuzón a tu llegada. Eso sí, recuerda que en Galicia da igual la época del año que sea, el agua de las pozas siempre está fría.