
Renfe busca reeditar el éxito del AVE de Arabia Saudí en otro país de Oriente Medio que también tiene en marcha un plan para extender su red ferroviaria. La operadora española abrirá una sucursal en Emiratos Árabes Unidos con el objetivo de ampliar su actividad en este mercado, con el foco puesto en la licitación que sacará la autoridad local, Etihad Rail, para prestar servicios ferroviarios en la que será la segunda línea de alta velocidad por el desierto, y que conectará los emiratos de Abu Dabi y Dubái.
Para optar al mismo, el consejo de administración de Renfe dio luz verde este martes a la creación de una nueva sucursal en esta federación de emiratos que está desarrollando una red de más de 900 kilómetros de recorrido para unir sus principales centros de actividad: Abu Dabi, Dubái, Ajmán, Sarja y Fuyaira. Precisamente entre las dos primeras está el mayor interés por este contrato, ya que ambas suman 7,5 millones de habitantes que aspiran a movilizar un importante flujo de viajeros entre sí, para los que se prevén poner en marcha trenes a velocidades de hasta 200 kilómetros por hora.
El proyecto completo contempla la conexión de 11 ciudades: desde Ghweifat, en la frontera con Arabia Saudí, hasta Fuyaira, al norte. El país destinará 12.000 millones de euros a la renovación y construcción de esta nueva red que esperan que en 2030 sea usada por 36,5 millones de usuarios al año. El objetivo final pasa por desarrollar un ferrocarril internacional que conecte los seis países del Golfo Arábigo entre sí: Arabia, Emiratos, Catar, Kuwait, Baréin y Omán. Con este último ya tiene creada una sociedad conjunta que permitirá avanzar en el desarrollo del proyecto.
Emiratos, país conocido
La compañía dirigida por Raül Blanco lleva desde 2022 colaborando con el operador nacional emiratí, Etihad Rail, en calidad de subcontratista de las empresas españolas Ineco y Sener, que han ejecutado algunos de los anteproyectos para el desarrollo de esta nueva red ferroviaria. Tras actuar de consultor para definir los requisitos de los trenes que prestarán los futuros servicios, ahora quiere ser la encargada de operarlos.
La compañía pública continúa avanzando en sus planes de internacionalización con el objetivo de mejorar su competitividad y posicionarse como un actor global, en línea con lo que han hecho sus ahora rivales europeos. Esta sucursal, que colgará de su filial de Proyectos Internaciones, permitirá a Renfe dotarse de una estructura más competitiva ante la posibilidad de que surjan oportunidades de negocio en Oriente Medio. Con ello, la compañía pública podrá contratar personal en el territorio, cumplir con las obligaciones legales que requiere el operar en el país, y desarrollar proyectos para el mismo, en aras de lograr una mayor eficiencia.
Renfe tiene puestos sus ojos en el mercado emiratí fruto de la profunda reestructuración económica que está llevando a cabo este país con el fin de reducir su dependencia del petróleo, donde el tren cobrará un peso especial. El país de Oriente Medio está organizando su nueva red de ferrocarriles a través de la empresa nacional Etihad Rail, que trabaja en adaptar al tráfico de trenes de viajeros su red convencional, hasta ahora centrada en el transporte de mercancías.
Séptimo país por el mundo
Además de su papel como subcontratista, la compañía española mantiene un vínculo constante con el operador nacional de Emiratos desde que en mayo de 2022 ambas compañías firmasen un Memorando de Entendimiento para compartir conocimientos relativos a la construcción y operación de infraestructuras y servicios ferroviarios.
La compañía española busca repetir así el éxito del proyecto Haramain, que une las ciudades saudíes de Medina y La Meca. En caso de resultar elegido como operador, prestará el servicio con trenes españoles, después de que CAF se adjudicara el concurso para fabricar estas unidades a cambio de 250 millones de euros.
Con esta nueva sucursal, Renfe extiende su presencia a su séptimo país por el extranjero, que se suma a las sucursales de Francia, México, Arabia Saudí (donde opera el proyecto Haramain); Bélgica, donde tiene instalada una oficina de representación en Bruselas; Estados Unidos (con su filial Renfe of America) y República Checa, país en el que opera a través de su filial Leo Express.