
Uno de los grandes operadores transitarios y logísticos valencianos, Grupo Alonso, ha logrado impulsar su tamaño y su rentabilidad en pleno temporal en el comercio marítimo mundial. El holding familiar que preside y dirige Jorge Alonso incrementó su beneficio consolidado neto un 80%, hasta los 59 millones de euros en su último ejercicio, el 2022, cuyas cuentas se acaban de hacer públicas en el Registro Mercantil.
El grupo que aglutina más de un centenar de sociedades cerró ese año con una cifra de negocio consolidada de 1.151 millones de euros, un 18,7% más que el anterior, según las cuentas de su sociedad holding, Eurotransac. El grupo eleva su negocio agregado incluyendo participadas y las ventas de su red de agencias sin consolidar por encima de 1.900 millones. El grueso de su negocio, la actividad transitaria (la gestión de los viajes de mercancías) y la logística ha sido la impulsora de su crecimiento, ya que generó 957 millones de euros, un 23% más que un años antes.
Se trata de una actividad en la históricamente ha estado ligado al puerto de Valencia, donde prácticamente nació a partir de una empresa de camiones, y que hoy en día desarrolla en más de 40 países, fundamentalmente a través de sus agencias transitarias y consignatarias agrupadas bajo las marcas Operinter y Alonso Forwarding. A ellas se unen una red de empresas que van desde el transporte por carretera a navieras, una terminal portuaria en Sagunto, terminales ferroviarias y centros logísticos.
El grupo valenciano ha convertido las energías renovables en su segunda pata de negocio desde hace años, gracias a su participación en Diverxia que desarrolla plantas, fundamentalmente fotovoltaicas, y Axial, que produce soportes y seguidores para instalar los paneles solares. En 2022 ese segmento incluso llegó a reducir ligeramente ingresos, hasta 154,8 millones de euros, aunque generó unos resultados de explotación de 13,3 millones de euros, muy superiores al año anterior.
La otra cara de la moneda es la tercera gran división del grupo, la de ocio y servicios, que tiene como estrella el espacio Madrid Exposiciones y Eventos Urbanos (MEEU), en el que gestiona 33.000 metros cuadrados de un centro de negocios, salas de exposiciones, locales de restauración y ocio en la estación de Chamartín en Madrid. También cuenta con un hotel y un puerto deportivo en Valencia, además de la distribuidora de bebidas de la marca de ron Legendario. Aunque esa división aumentó ingresos por encima de 39 millones de euros, su resultado de explotación fue negativo en 5 millones.
Menos deuda
Con el viento a favor por los elevados precios de los fletes marítimos y el transporte, el grupo valenciano también redujo su deuda financiera, que pasó de 147,2 millones a 117,89 millones de euros al cierre de 2022, pese a la compra de un edificio por 8,15 millones de euros para oficinas mediante un arrendamiento financiero.
Además, el grupo valenciano también incrementó su plantilla, hasta 1.985 personas. Más de 200 de sus empleados trabajan fuera de España, fundamentalmente en China, México y Sudamérica.