El futuro de la movilidad ya está aquí. Tras años de pruebas con el hidrógeno como combustible para todo tipo de transportes, Alemania ha puesto en marcha la primera ruta ferroviaria que solo utiliza trenes propulsados por este combustible. En concreto, se trata de una línea que conecta Cuxhaven, Bremerhaven, Bremervörde y Buxtehude, este último en las afueras de la ciudad de Hamburgo y que contará con 14 unidades del primer tren de hidrógeno del mundo, el Coradia iLint de Alstom.
Estos vehículos sustituyen a las 15 unidades diésel que están en operación en la actualidad y solo emiten vapor y agua condensada, y funcionan con un bajo nivel de ruido. La línea es operada por la compañía alemana LNVG. En el proyecto también han participado otros socios como el operador Elbe-Weser (evb) y la empresa de gas e ingeniería Linde.
"La movilidad sin emisiones es uno de los objetivos más importantes para garantizar un futuro sostenible, y Alstom tiene la clara ambición de convertirse en el líder mundial en sistemas de propulsión alternativos para el ferrocarril. El primer tren de hidrógeno del mundo, el Coradia iLint, es una muestra de nuestro claro compromiso con la movilidad verde y con la tecnología más avanzada. Estamos muy orgullosos de poner, junto con nuestros socios, esta tecnología en funcionamiento con trenes serie, alcanzando así una primicia mundial", afirma Henri Poupart-Lafarge, director general y presidente de Alstom.
Repostaje diario
Estos trenes que ahora se ponen en servicio requieren un repostaje diario que se llevará a cabo en la estación de servicio de hidrógeno de Linde. Los vehículos tienen una autonomía de 1.000 kilómetros y Alstom, su fabricante, señala que pueden circular durante toda la jornada con un solo depósito de hidrógeno.
Con respecto a su desempeño, en la red de evb, el tren viaja a velocidades de entre 80 y 120 kilómetros por hora, con una velocidad máxima de 140 kilómetros por hora. El sistema de gestión inteligente de la energía de tracción permite una mayor eficiencia energética y una reducción del consumo de hidrógeno, señalan desde el fabricante. Durante las fases de aceleración, la energía de las pilas de combustible se usará fundamentalmente para alimentar a los equipos de tracción y los equipos auxiliares. Además, durante estas fases, se utilizará la energía de la batería para ayudar a la aceleración. Durante las fases de baja aceleración o de avance por inercia una parte de la energía de las pilas de combustible se utilizará para recargar la batería. Si la batería está lo suficientemente cargada, las pilas de combustible reducen su funcionamiento para alimentar solo a los equipos auxiliares.
Durante las fases de frenado las pilas de combustible se desactivan casi por completo. El sistema de tracción recoge la electricidad generada por los motores en "modo generador" aprovechando la energía cinética del vehículo durante su frenado. En la actualidad, Alstom está trabajando en cuatro proyectos de trenes regionales con pila de combustible de hidrógeno. Dos de ellos se localizan en Alemania, para el suministro de 14 trenes Coradia iLint en la región de Baja Sajonia y de 27 trenes Coradia iLint en el área metropolitana de Frankfurt. El tercer contrato es para la región de Lombardía, en Italia, donde Alstom está construyendo seis trenes de hidrógeno Coradia Stream, con opción a ocho más.
Por su parte, en Francia, la compañía trabaja en el desarrollo de 12 trenes de hidrógeno Coradia Polyvalent para cuatro regiones diferentes. El Coradia iLint, además, ya se ha probado con éxito en Austria, Países Bajos, Polonia y Suecia, entre otros países.
Alstom inició este pionero proyecto en el año 2014, pero no fue hasta 2016 cuando se comenzaron a producir los primeros trenes preseries, momento en que se iniciaron las pruebas de circulación comercial. Dos años después, en 2018, se lleva a cabo la homologación y certificación de los trenes en Alemania. En 2020, se hicieron las pruebas de repostajes y consumos en Países Bajos, cuando también se puso en marcha el servicio comercial en la vecina Austria.
Una oportunidad para España
El hecho de que los trenes de hidrógeno no necesiten circular por vías electrificadas -es decir, pueden operar en zonas sin catenaria, da una oportunidad a España donde, en la actualidad, hay más de 4.000 kilómetros de vías con estas características que se operan con hasta 250 locomotoras y trenes diésel.
A pesar de los numerosos proyectos de electrificación que se están llevando a cabo, una parte importante de la red ferroviaria europea seguirá sin contar con catenaria en el largo plazo, por lo que el hidrógeno abre la puerta a esta posibilidad y a una movilidad sostenible.