DJI, la compañía especializada en drones y grabaciones, ha anunciado Manifold 2, un superprocesador que puede colocarse en aeronaves para programar funciones de vuelo autónomo con detección de obstáculos, de modo que se transforman en robots autónomos aéreos.
La nueva generación permite a los consumidores, principalmente empresas, una capacidad de procesamiento adicional para procesar inmediatamente gran cantidad de información visual en el propio dron.
"Al darle al dron la capacidad de percibir y analizar su entorno en tiempo real, Manifold 2 abre nuevas posibilidades. Por ejemplo, un DJI Matrice 210 equipado con AutoModality puede volar de forma autónoma en lugares sin señal de GPS ni radio, que son donde se encuentran los datos más valiosos", ha explicado Ed Koch, jefe de tecnología de AutoModality, la empresa de referencia en el desarrollo de soluciones autónomas de drones.
DJI explica que este procesador la puerta a diversos usos y, para mayor flexibilidad, es posible escoger entre una CPU Intel Core i7-8550U o un módulo superprocesador para IA en la periferia Nvidia Jetson TX2. Ambas versiones son compatibles con los drones de empresa de la compañía entre los que se encuentra la serie Matrice 210 y la serie Matrice 600.
Además, con el SDK de DJI se pueden integrar con los sistemas internos y sensores de los drones. Esto permite una mayor personalización y encaje en el ecosistema de soluciones de software y hardware.
Ambos modelos incluyen puertos USB, UART y CAN, entre otros, para que los desarrolladores puedan enlazar varios procesadores Manifold 2 y utilizarlos como base para transformar los drones de DJI en robots aéreos especializados para usos y sectores específicos.
