
Un día son 24 horas, o 86.400 segundos, que es el tiempo que nuestro planeta Tierra tarda en girar sobre su propio eje con una precisión de aproximadamente un milisegundo.
No obstante, desde el 2020, este proceso comenzó a acelerarse acortando imperceptiblemente las 24 horas estándar del día solar promedio en unos pocos milisegundos. Un milisegundo (ms) equivale a 0,001 segundos, bastante menos que un parpadeo, que dura unos 100 milisegundos.
La única forma de medir estas minúsculas variaciones diarias de la velocidad de giro de la Tierra es con relojes atómicos, que se introdujeron en la década de 1950. El número de milisegundos por encima o por debajo de 86.400 segundos se conoce como duración del día (LOD).
Y en esta web, puedes ver cuánto ha durado exactamente cada día. Por ejemplo, el jueves 26 de junio duró 23 horas, 59 minutos, 59,9988409 segundos, y este viernes 27 de junio está previsto que dure 23 horas, 59 minutos, 59,9989855 segundos.
Como señala el astrofísico Graham Jones para la web Time and Date, "Nuestro planeta es un cronómetro casi perfecto , pero no del todo". Y como llevamos varios años con el planeta acelerándose esto va a tener consecuencias directas en la duración de los días y en este 2025 la Tierra se acerca a lograr nuevos récord de días más cortos.
En concreto, los días 9 de julio, el 22 de julio y el 5 de agosto tienen la posibilidad de convertirse en el día más corto de la historia debido a la órbita de la Luna, ya que la rotación de la Tierra es de hecho más rápida cuando la Luna está mucho más al norte o al sur del ecuador de la Tierra.
Lo que no está claro es el motivo por el que ha ocurrido esto, "Las variaciones a largo plazo en la velocidad de rotación terrestre se ven influenciadas por una larga lista de factores , incluyendo el complejo movimiento del núcleo terrestre, los océanos y la atmósfera" explica Jones. Y otros factores, como el que te contamos la semana pasada, con la macropresa que ha construido China.