Cada día vemos nuevos avances tecnológicos en los diferentes sectores de la sociedad, por ejemplo, esta semana hemos sabido que el padre de ChatGPT, Sam Altman, se ha iniciado en un proyecto para desarrollar una IA capaz de convertirse en tu asesor médico personalizado o como en Wimbledon están usando esta misma tecnología para proteger a los tenistas del abuso o mensajes de odio en Internet.
Pero como decíamos son muchas las áreas en la que el desarrollo es constante, y en el entorno bélico no iba a ser una excepción. En este caso se trata del Ministerio de Defensa, el cual ha encargado a la empresa vasca Gogoa Mobility Robots, y en concreto a su sección de Cyber Humans Systems (Sistemas ciber humanos) la creación de un exoesqueleto de combate para equipar a los soldados del ejército español.
Un exoesqueleto es una estructura esquelética que recubre, protege y soporta el cuerpo de los soldados, en este caso, y que sirven de apoyo y asistencia para los movimientos, o para aumentar las capacidades del cuerpo.
Lo cierto es que esta compañía está especializada en el diseño de exoesqueletos biomecánicos de uso sociosanitario e industrial, pero desde el Ministerio han confiado en ellos para desarrollar este modelo llamado GUDEX, de la mezcla entre Gudari (soldado en euskera) y exoesqueleto, para equipar a los soldados españoles.
Este traje de "Iron Man" destaca por ser resistente a los efectos de climas adversos, refuerza el cuello para impedir lesiones cervicales en caso de impacto, proporciona mayor estabilidad en el brazo para garantizar mayor precisión en el disparo entre otros aspectos o permite cargar hasta 40 kilos con relativa facilidad.
Además, el traje está equipado con todo tipo de sensores miden las constantes vitales, ritmo cardíaco o saturación de oxígeno en sangre capaz de proporcionar datos en tiempo real sobre la condición física del soldado. Y según indican ponérselo y quitárselo es cuestión de segundos.
Presentado en la última edición de la feria de Defensa y Seguridad, el Ministerio explicó que la idea es que el ejército español esté equipado con estos exoesqueletos para el año 2035 y han explicado que han cofinanciado al 50% dicho proyecto con 500.000 euros y que compartirán los derechos con la empresa.