La tecnología se integra cada vez en más aspectos de nuestra vida, y una consecuencia directa de ello es que en nuestros hogares cada vez hay más dispositivos electrónicos para ayudarnos a realizar ciertas tareas o para nuestro propio entretenimiento.
A su vez, esto consecuentemente hace que todos estos aparatos necesiten estar conectados a la red eléctrica para funcionar, y mientras que cada vez más dispositivos son inalámbricos, lo cierto es que los aparatos del hogar siguen requiriendo cables.
Y claro, al final nuestras casas y paredes están repletas de cables de todo tipo y color, y en el caso de que tengamos que hacer un arreglillo y no queramos llamar a un profesional, es importante saber para qué sirve cada cable y es que la clave está en el color que tiene.
Los cables por colores
Cada tipo de cable eléctrico tiene sus propias características y especificaciones técnicas, por lo que es importante seleccionar el cable adecuado para la aplicación específica que queremos hacer. El motivo por el que se usan colores es para señalizar los diferentes tipos que hay por razones de seguridad y conveniencia, y un error en la instalación podría causar cortocircuitos o incluso incendios.
- Cable verde y amarillo: Son los que usan para la toma de tierra.
- Cable azul: Es un cable neutro, que se usa para permitir a la corriente volver.
- Cable marrón: Cable de fase, lo que quiere decir que es por donde entra la corriente eléctrica. Puede ser marrón, aunque también puede ser negro o gris, dependiendo del color del aparato que lo lleve incorporado.
- Cable negro: Cable de fase, que también puede ser blanco. Visible en la mayoría de instalaciones.
- Cable blanco: Cable neutro. Son también tomas de tierra, pero solo se conectan al transformador para llevar de vuelta la energía.
- Cables de colores con rayas: Son neutrales, al igual que los anteriores. Se usan para identificar qué cable neutral corresponde a cada cable de color.
- Cables de colores: Excepto los que tengan rayas, son cables de corriente o de carga. El más común es el rojo.
Si vas a hacer algo que involucre cables, es muy importante que prestes atención a estas diferencias en los cables para evitar errores y facilitar la instalación y el mantenimiento. Y ten en cuenta que esta distribución de colores puede variar por región o por regulaciones locales en los diferentes países del mundo.