Sanidad

La Iglesia toma posición ante el coronavirus con cuatro recomendaciones

  • La Conferencia Episcopal invita a las Diócesis a compartir sus medidas
  • Retirar el agua bendita, comulgar con la mano, dar la paz con la vista y extremar la higiene
  • Los obispados también proponen evitar los besamanos y besapiés

La Conferencia Episcopal ha distribuido una serie de pautas y recomendaciones para evitar la expansión del coronavirus en el ámbito eclesiástico. En concreto, y según indica el secretario general de la Conferencia Episcopal Española, la Iglesia invita a las diferentes diócesis a considerar las siguientes cuestiones: "La conveniencia de retirar el agua bendita de las pilas que hay en las entradas de las iglesias y en otros lugares de devoción; la posibilidad de ofrecer en la celebración de la eucaristía otro gesto de paz distinto al habitual de abrazar o estrechar la mano a los que están próximos; que las personas que distribuyen la comunión durante la de la eucaristía, se laven las manos antes y después de este momento; que las muestras de devoción y afecto hacia las imágenes, tan propias de este tiempo de Cuaresma y en la próxima Semana Santa, puedan ser sustituidas por otras como la inclinación o la reverencia, evitando el contacto físico con ellas, y facilitando una mayor rapidez que evite aglomeraciones.

Además todo lo anterior, la Conferencia Episcopal deja la puerta abierta a algunas diócesis, templos, cofradías o parroquias para añadir otras recomendaciones más específicas, atendiendo a las costumbres propias de esos lugares.

Por su parte, y según informa la agencia SIC, los diferentes arzobispados también han realizado sus respectivas recomendaciones. Así, desde Mérida-Badajoz se propone "extremar las medidas de higiene adecuadas en los actos litúrgicos, especialmente en aquellos actos que conlleven acciones de besamanos a imágenes religiosas". También confía en "la prudencia de los párrocos y responsables de Hermandades y Cofradías" para "que procuren ordenar con sentido común estas celebraciones y que, a la hora de venerar dichas imágenes, se realice mediante una inclinación de cabeza, tal y como se está realizando estos días en otros lugares de España, evitando el contacto directo con la imagen".

La Diócesis de Ávila, en espera de los protocolos y las indicaciones que pudieran emitir las autoridades sanitarias, y ante las consultas recibidas, el Obispado de Ávila "apela a la prudencia sin caer en alarmismos innecesarios". En concreto, "los llamados besapiés o besamanos a imágenes de Cristo, santos, Vírgenes, o la Santa Cruz, pueden sustituirse por una sencilla inclinación de cabeza ante ellas. De tal forma que, atendiendo siempre a ese principio de prudencia y sentido común, evitemos situaciones que puedan dar lugar a la propagación de enfermedades víricas por contagio".

Por su parte, la Diócesis de Cartagena, hace una invitación a los fieles en línea de otras obispados, pero también recomienda, durante la celebración de la misa, "se suprima el gesto de la paz y sugerimos, además, que la Comunión se reciba, preferiblemente, en la mano.

La Archidiócesis de Madrid pidió el pasado fin de semana a los fieles que asistieron a los cultos en honor a Jesús de Medinaceli, Jesús el Pobre y Jesús del Gran Poder a que se "abstengan de besar las tallas –como es tradición– para evitar posibles contagios por coronavirus".

El Obispado de Ávila "apela a la prudencia sin caer en alarmismos innecesarios"

Junto a todo lo anterior, la Diócesis de Málaga "recomienda a los párrocos que se vacíen las pilas de agua bendita de los templos, que en las celebraciones litúrgicas se evite el contacto físico en el momento de la paz y se distribuya la comunión sólo en la mano y no en la boca". En cualquier caso, ante la petición de algunos fieles, el "obispado informa a los sacerdotes que si algún fiel cristiano insiste en recibir la comunión en la boca, se le puede dar cuando los demás fieles hayan comulgado".

El Obispado de Santander recalca que "acomodará la práctica religiosa" a cualquier directriz que emitan las autoridades sanitarias tras apuntar que "no hay motivo para la alarma o para dejar de acudir a la iglesia".

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