
La niacina, también denominada vitamina B3, es una vitamina hidrosoluble que pertenece al grupo de las vitaminas B. Como bien todos sabemos, desempeña un papel determinante en los procesos fisiológicos del organismo, desde la producción de energía hasta el mantenimiento de la salud de la piel y el sistema nervioso.
Funciones
¿Y para que sirve? Pues bien, para muchas cosas. Entre ellas, cabe destacar las siguientes:
- Regulación del ADN. Juega un papel destacado en la reparación del ADN y la prevención del daño oxidativo, lo que ayuda a reparar las células.
- Función del sistema nervioso. El NAD y el NADP, coenzimas derivadas de la niacina, son cruciales para la función neuronal y la transmisión de señales nerviosas.
- Cuidado de la piel. Es relevante para mantener la integridad de la piel y puede ayudar en afecciones dermatológicas como el acné.
- Síntesis de lípidos. Es necesaria para la síntesis de ácidos grasos y la producción de colesterol.
- Metabolismo energético. Participa en la conversión de los alimentos en energía a través de la glucólisis y el ciclo de Krebs, ayudando a mantener adecuados los niveles de energía celular.
En profundidad
La dosis diaria recomendada de 13 - 18 mg de niacina puede cubrirse con una dieta muy equilibrada, incluso como vegano o vegetariano. Se encuentra de manera natural en fuentes animales como carne, pescado, aves de corral huevos y productos lácteos, y en fuentes vegetales, como cereales integrales, nueces, semillas y legumbres.
Ahora bien, hay quienes toman suplementos con niacina. Ante este panorama, son muchos los españoles y españolas que se preguntan cuáles son los riesgos a los que se exponen los individuos que toman altas dosis de este tipo de vitamina B.
Más detalles
Según un estudio publicado en la revista 'Nature Medicine', un exceso de niacina en la actualidad duplica el riesgo de sufrir eventos cardiovasculares graves, hasta niveles comparables a los de la diabetes o a un infarto previo. Lo cual ha generado cierto debate en las redes sociales.
"Es un riesgo bastante considerable. Está a la par de lo que consideramos otros riesgos importantes", ha asegurado de manera contundente Stanley Hazen, jefe de la sección de cardiología preventiva y rehabilitación cardiaca de la Clínica Cleveland y autor principal del estudio.
A tener en cuenta
Más allá de esos, las dosis altas de niacina pueden provocar lo siguiente:
- Diabetes.
- Daño hepático.
- Gota.
- Diarrea.
- Picazón.
- Náuseas y vómitos.
- Latidos cardíacos rápidos.
- Enrojecimiento de la piel.
Por si esto fuera poco, puede empeorar las alergias, la enfermedad de la vesícula y los síntomas de algunos trastornos de la tiroides. Por tanto, si crees que puedes tener una sobredosis de niacina, es muy recomendable buscar atención médica de inmediato.