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Cómo evitar el ataque de un ciervo

Foto: Canva.

Aunque no son los cérvidos de mayor tamaño, los ciervos son animales salvajes y, a pesar de un aspecto que les confiere una imagen algo tierna, pueden ser muy peligrosos en el caso de encontronazos con el ser humano.

Los ciervos son animales de gran tamaño y peso elevado, por lo que pueden causar heridas de importancia a los seres humanos en caso de ataque, a lo que hay que sumar el riesgo de su cornamenta, que supone otro peligro si el animal se decide a embestir.

Cómo evitar el ataque de un ciervo

Antes de un posible ataque, nos hemos de enfrentar a la circunstancia de encontrarnos por sorpresa con un ciervo. Será en ese momento en el que aún podremos evitar (o al menos, intentarlo) el ataque de este animal. Para ello, es preciso tomar una serie de precauciones:

  • Hay que dar espacio al animal para que no se sienta amenazado. Por lo tanto, es indispensable no acercarse, ni tocarlo.
  • Hay que ser especialmente prudente en el caso de que el ciervo se encuentre en pleno celo o esté acompañado de sus crías. Si es así, resultará aún más importante no acercarse.
  • En la medida de lo posible, no hay que correr o hacer movimientos bruscos porque eso podría provocar precisamente lo que se quiere evitar: el ataque del ciervo.
  • Si se desea abandonar el lugar, lo mejor es esperar a que el ciervo deje de mostrar señales de inquietud y, en caso de hacerlo, siempre retrocediendo con cuidado.

Cómo defendernos del ataque de un ciervo

Si, a pesar de tomar precauciones, el ciervo finalmente ataca es preciso conocer una serie de claves que nos pueden ayudar en esa circunstancia tan delicada y peligroso. De acuerdo con el portal especializado DeerSeason.org, esto es lo mejor que podemos hacer:

  • Hay que colocarse detrás de un árbol, una roca o cualquier elemento que nos proteja de una posible embestida.
  • En el caso de que haya un árbol cerca, una solución puede ser la de trepar el árbol.
  • Gritar y hacer ruido mientras se mueven los brazos para hacerlos más grandes a ojos del ciervo puede parar su ataque.
  • Si el ciervo realiza la embestida y nos tira al suelo, lo mejor es hacerse un ovillo y protegernos la cabeza y el cuello. Si fuese posible, también sería recomendable sujetar la cornamenta del animal para evitar que nos la clave.
  • Cuando el ciervo cese en su ataque hay que seguir en el suelo, ya que así tendremos más opciones de que el ciervo considere que el peligro ha pasado y se aleje del lugar.
  • Solamente en el caso de que el ciervo no deje de atacar es recomendable intentar frenar ese ataque pasando a la ofensiva y arrojando cualquier objeto que esté a nuestro alcance.
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