Infusión de serpol o tomillo de monte: propiedades, beneficios y por qué tomarla todas las semanas

El serpol o tomillo de monte es quizás una de las plantas aromáticas menos conocidas, sin embargo, tiene gran cantidad de propiedades medicinales y de uso culinario. Generalmente, crece en zonas bajas —especialmente en terrenos montañosos y áridos— y sus flores adquieren un color rosado, según recoge Cuerpomente.

La esencia del tomillo de monte es de color amarillo pálido y entre sus principales compuestos destacan algunos como el pineol, timol, carvacrol, geraniol y linalol, así como ácidos fenólicos. Además, también presenta pequeñas cantidades de principios que le otorgan un sabor más amargo como el luteol, diosmetol y los taninos.

Propiedades

Gracias a esta composición, se trata de una planta con propiedades antisépticas, bactericidas, expectorantes, antitusivas, digestivas y carminativas, es decir, previene de la formación de gases. Es por tanto, especialmente útil para gripes, resfriados, sinusitis, faringitis, laringitis y bronquitis.

Esta es especialmente recomendable para estas fechas, ya que ayuda a combatir las alergias primaverales causadas por el polen, de ahí que sea recomendable su consumo todos los días. Por otra parte, si se usa externamente, puede ser útil para varices, hemorroides, quemaduras, rozaduras, así como para la tensión muscular o la lumbalgia.

Para llevar a cabo la infusión de esta planta, es necesario poner a hervir un vaso de agua —aproximadamente 250 mililitros— y añadir una cucharada de tomillo de esta planta y dejar hervir durante 2 minutos. Posteriormente, dejar que repose otros 5 y colar la infusión.

En cuanto a su valor nutricional, destaca especialmente su alto contenido en hidratos de carbono, fibra, hierro, magnesio, fósforo y potasio. Además, su alto contenido en calcio hace que sea especialmente beneficioso para la salud de los huesos.