
La madurez en las personas no tiene que estar relacionada con la edad, esta se determina con las actitudes y los comportamientos de cada uno. Para saber los rasgos o características que definen a alguien inmaduro, el psiquiatra Enrique Rojas ha subido una publicación a sus redes sociales en las que define a las personas totalmente opuestas, las maduras, a través de cinco indicadores.
El experto señala que la madurez es un estado mental y que no es "un lugar al que llegas y te instalas, ya que la vida es un movimiento, un cambio constante". Comenta que las personas maduras tienen la capacidad para afrontar los problemas de la vida sin rendirse al saber relativizar lo que sucede.
El psiquiatra ha elaborado de manera muy visual, varias imágenes con cinco indicadores en las que define los rasgos de una personalidad madura.
Características de la personalidad de una persona madura
- Ser realista y exigente con las posibilidades. Para ello hay que tener los pies en el suelo aunque a la vez no renunciar a las ilusiones y retos que exigen grandes esfuerzos.
- Tener sentido del humor. Saber reírse de uno mismo y de las circunstancias ayuda a ver los problemas con perspectiva.
- Tener buena educación entre corazón y cabeza. Una personalidad equilibrada es aquella ni demasiado fría ni demasiado caliente.
- Capacidad para superar los acontecimientos negativos. Tener tolerancia para superar frustraciones. Pensar que las derrotas son las que nos hacen crecer.
- Ser responsables de los propios actos. En todos los ámbitos, familiar, profesional, afectivo o de amistad.
Rasgos de una persona inmadura
En el caso contrario, las personas con inmadurez emocional son las que tienen dificultad para gestionar sus emociones de forma adecuada y madura. Tienen conductas impulsivas, falta de empatía, problemas para asumir responsabilidades y tendencia a evitar situaciones desafiantes. Por eso, estos rasgos hacen muy difícil una comunicación efectiva, provocando malentendidos y conflictos repetitivos, algo que incrementa el estrés y la frustración, debilitando el vínculo afectivo y la confianza en la relación.
Algunos rasgos de inmadurez emocional son:
- Falta de responsabilidad en sus acciones y palabras.
- Culpar a otros de los problemas.
- Dificultad para expresar las emociones.
- Ausencia de empatía sobre las necesidades y sentimientos del otro.
- Falta de compromiso en las relaciones.
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