
La enfermedad de Crohn es una afección crónica del sistema digestivo que afecta a un número creciente de personas en todo el mundo. Aunque se ha investigado mucho sobre esta enfermedad en las últimas décadas, aún existen muchas incógnitas en cuanto a sus causas y tratamiento.
En este artículo explicamos qué es la enfermedad de Crohn, las posibles causas subyacentes y las opciones de tratamiento disponibles. Además, destacaremos la importancia de la consulta a un gastroenterólogo, un especialista en el aparato digestivo, para el diagnóstico y manejo de esta enfermedad.
¿Qué es la Enfermedad de Crohn?
La enfermedad de Crohn es una enfermedad inflamatoria del sistema digestivo que afecta principalmente el tracto gastrointestinal. Puede manifestarse en cualquier parte del tracto, desde la boca hasta el ano, pero es más comúnmente diagnosticada en el intestino delgado y el colon. La inflamación en la enfermedad de Crohn es crónica y suele presentar episodios de exacerbación y remisión, lo que significa que los síntomas pueden variar en intensidad con el tiempo.
Los síntomas característicos de la enfermedad de Crohn incluyen dolor abdominal, diarrea, pérdida de peso, fatiga, sangrado rectal y fiebre. Estos síntomas pueden ser debilitantes y afectar significativamente la calidad de vida de quienes la padecen.
Causas de la Enfermedad de Crohn
Las causas exactas de la enfermedad de Crohn aún no se comprenden completamente, pero se cree que es el resultado de una combinación de factores genéticos, inmunológicos y ambientales. Algunos de los factores que se han relacionado con la enfermedad de Crohn son:
- Predisposición genética: se ha observado que la enfermedad de Crohn tiende a ocurrir en familias, lo que sugiere un componente genético en su desarrollo. Los estudios han identificado ciertos genes que pueden aumentar la susceptibilidad a la enfermedad. Sin embargo, no es una enfermedad puramente hereditaria, y la presencia de estos genes no garantiza que alguien desarrollará la enfermedad.
- Sistema inmunológico: la hipótesis más aceptada es que la enfermedad de Crohn es una enfermedad autoinmune, en la que el sistema inmunológico del cuerpo ataca por error el revestimiento del tracto gastrointestinal. Esto desencadena una respuesta inflamatoria crónica, que causa los síntomas característicos de la enfermedad.
- Factores ambientales: aunque la predisposición genética y los problemas del sistema inmunológico juegan un papel importante, se ha observado que factores ambientales desencadenantes pueden contribuir al desarrollo de la enfermedad de Crohn. Estos factores pueden incluir hábitos como el consumo de tabaco y la dieta.
Tratamiento de la Enfermedad de Crohn
El tratamiento de la enfermedad de Crohn se enfoca en aliviar los síntomas, inducir y mantener la remisión y prevenir complicaciones a largo plazo. El enfoque terapéutico puede variar según la gravedad de la enfermedad y la respuesta del paciente. Algunas de las opciones de tratamiento son:
- Medicamentos: los medicamentos son la base del tratamiento de la enfermedad de Crohn. Los antiinflamatorios, como los corticosteroides o la mesalazina, también conocida como 5-ASA, se utilizan para rebajar y controlar la inflamación y los síntomas durante las exacerbaciones. Los medicamentos inmunosupresores y biológicos se utilizan para mantener la remisión y prevenir recaídas. Otros tratamientos más novedosos inciden sobre el sistema inmunológico, como por ejemplo los anticuerpos monoclonales anti-TNF. Es importante que el tratamiento farmacológico sea supervisado por un médico especialista, ya que algunos de estos medicamentos pueden tener efectos secundarios significativos. Cuando la enfermedad remite, se debe intentar retirar la toma de corticoides y mantener únicamente el 5-ASA.
- Cambios en la dieta: algunas personas encuentran alivio de sus síntomas al realizar cambios en su alimentación. Esto puede implicar evitar alimentos que desencadenen la inflamación y optar por una dieta baja en residuos o líquida durante las exacerbaciones. Sin embargo, la dieta por sí misma no es un tratamiento sustitutivo de los medicamentos y debe ser supervisada por un profesional de la salud.
- Cirugía: en casos graves de enfermedad de Crohn, la cirugía puede ser necesaria para extirpar la parte afectada del intestino. Esto se hace sobre todo cuando se producen complicaciones como las obstrucciones intestinales, las fístulas, el megacolon tóxico, la perforación o los abscesos. La cirugía suele ser el último recurso y se reserva para situaciones en las que otros tratamientos no han sido efectivos.
Visita a un gastroenterólogo (especialista en aparato digestivo)
Si alguien experimenta síntomas como dolor abdominal persistente, diarrea crónica, hemorragia rectal o pérdida de peso inexplicada, es importante que busque atención médica. El primer paso para el diagnóstico y tratamiento adecuado de la enfermedad de Crohn es consultar a un gastroenterólogo, un médico especializado en el diagnóstico y tratamiento de trastornos del aparato digestivo.
El gastroenterólogo realizará una evaluación exhaustiva, que puede incluir análisis de sangre, estudios de imágenes como endoscopias y colonoscopias, y otros estudios para confirmar el diagnóstico de la enfermedad de Crohn. Una vez diagnosticada, el gastroenterólogo trabajará en estrecha colaboración con el paciente para desarrollar un plan de tratamiento adecuado.