
Los jóvenes son los más optimistas de cara al futuro del mercado al haber sido los principales beneficiados de la reforma laboral por las subidas periódicas del Salario Mínimo Interprofesional (SMI). La consultora global de estrategia y marketing Simon-Kucher, a través del estudio Next Consumer, adelanta que los españoles se muestran más positivos en relación con el gasto y por ello, prevé que el 50% de la población se plantee gastar más a lo largo del año.
El aumento del consumo no solo se deberá a la positividad de los jóvenes, ya que dentro de ese 50% hay tres factores fundamentales que intervienen directamente en la toma de decisiones relacionadas con el gasto, y son las perspectivas laborales, la susceptibilidad relacionada con la inflación y la mentalidad que se tiene ante el gasto.
Entre todos los españoles que se están preparando para aumentar el consumo, solo el 40% cree que tendrá un aumento en sus ingresos. Y mientras que algunos españoles sí que tendrán la suerte de contar con mayores ingresos, otros tendrán que recurrir a sus ahorros para financiar este aumento en el gasto. Esta variedad de posibilidades de gasto hace que la consultora Simon-Kucher genere diversas realidades de consumo en España.
Distintos tipos de consumidores
Por una parte estarán los "quiero y puedo". Este grupo está compuesto principalmente por los jóvenes, quienes representan un porcentaje significativo del total y constituyen el motor del consumo. Su mayor capacidad adquisitiva se debe a las reformas laborales como la subida del Salario Mínimo Interprofesional, y una mentalidad YOLO, You Only Live Once, que se traduce por "solo se vive una vez", que hace que planee un mayor gasto en los próximos meses. Entre ese aumento del consumo, se prevé que los sectores más beneficiados sean el ocio, turismo y restauración.
Por otro lado se encuentran los "quiero y no puedo", representados principalmente por adultos mayores, quienes anticipan un aumento en el gasto debido a la percepción de que la inflación va a seguir subiendo. Esta mentalidad influye en que gran parte de su presupuesto se destine a productos esenciales como alimentos y artículos básicos, que han sido los que más afectados se han visto por la subida de los precios.
Este colectivo, al no haber experimentado una mejora equivalente en sus ingresos, prevé que se verá obligado a usar parte de sus ahorros para financiar estos gastos, y buscará activamente ofertas y promociones en los bienes básicos para tratar de mantener su nivel de consumo.
En el último grupo están los "no quiero porque no puedo". Este grupo está formado por gente mayor con ingresos bajos. Ellos planean reducir su consumo debido al empeoramiento de su capacidad adquisitiva. Esto impactará negativamente en su compra semanal, con una disminución del consumo de productos no esenciales.