Vicio, la marca de hamburguesas smash fundada por el ganador de Masterchef 7, Aleix Puig, y su socio Oriol de Pablo, aspira a cerrar este año con unos ingresos de más de 39 millones de euros y el que viene con más de 71 millones, según desvela en su documento para inversores.
La cadena, fundada como marca digital a finales de 2020, ha cosechado en poco tiempo un enorme éxito de público y una comunidad de fans que le llevaron a cerrar el año pasado con una facturación de casi 19 millones de euros, cifra que esperan duplicar en 2023 gracias al impulso recibido de sus últimas rondas de financiación.
Si a comienzos de abril la enseña lograba cerrar una ronda de financiación serie A por valor de 17 millones de euros impulsada por Iris Ventures, su confianza en la comunidad de seguidores de sus hamburguesas le llevó a lanzar un proceso de crowdfunding que se ha abierto esta misma mañana.
El proceso permite a los clientes de la marca formar parte del accionariado de la cadena y de su futuro crecimiento a través de tres rangos de inversión, la más baja de 40 euros y la más alta de 14.000, con una suma intermedia de 4.000 euros.
Con el objetivo de alcanzar los 21 millones de euros de gasolina, Vicio se ha marcado el reto de aumentar su facturación un 111% en 2023 hasta superar los cerca de 40 millones de euros y realizar 17 aperturas de sus locales, expansión en la que se prevén inauguraciones tanto de locales con servicio en sala como establecimientos dedicados en exclusiva al envío a domicilio.
La estrategia de la joven enseña se caracteriza por una apuesta decidida por una carta reducida con el formato de moda entre las hamburguesas como protagonista, con 9 referencias de smash burgers, cuatro acompañantes y seis postres y batidos, además de una imagen moderna y una comunicación desenfadada en la que no dudan en bromear con la cadena de mayor éxito en la última década en nuestro país, Goiko, y al que se refieren como "nuestro mayor competidor" en su documento para inversores.
100 millones de valoración
La compañía, que se ha apoyado en la plataforma Crowdcube para su campaña de crowfunding, ha fijado una valoración previa a la ronda de 100 millones de euros, una cifra elevada a la vista que la compañía cerró el último ejercicio con un beneficio bruto de apenas 100.000 euros. En la documentación remitida, Vicio espera que el ebitda al cierre del próximo año sea de 4,3 millones de euros.
La documentación puesta a disposición de los interesados revela otras métricas de la compañía hasta entonces desconocidas. Una es su estructura de capital, donde Aleix Puig, cofundador y consejero delegado de Vicio, mantiene un 27,45% de las acciones. El reparto del resto de las acciones no se desvela. Otra de las cifras que la compañía publica son las relativas al cierre de todos sus ejercicios. El balance son pérdidas en dos de los tres años que la compañía está operativa, aunque no son significativas.
Con todo, los inversores han acudido con optimismo a la ronda. La compañía ha captado un millón de euros antes de que se cumplieran las dos horas desde la apertura del proceso. La meta, según el anuncio inicial, era ampliar capital hasta en cuatro millones de euros. Los inversores interesados tienen todavía una semana para seguir comprando títulos de la compañía.