Familia Torres ha presentado su segundo espumoso, un rosado de su bodega experimental Vardon Kennett, que utiliza uva de viñedos de altura, correspondiente a la añada de 2017 y con una tirada de menos de 1.000 botellas dirigidas a hostelería y tiendas especializadas mayoritariamente en España.
El lanzamiento de este espumoso coincide en el tiempo con las nuevas incursiones de otras bodegas catalanas potentes en cava como Freixenet y Codorníu en vinos tranquilos, pero desde Torres inciden en que no prevén más espumosos y siguen centrados en los vinos tranquilos de alta gama: "La intención es mantener este proyecto de la quinta generación de la familia como algo pequeño y exclusivo", han indicado a elEconomista.es.
Los espumosos de Vardon Kennet son ediciones limitadas y no forman parte de la DO Cava, ya que surgen de la experimentación, y el cava marca unos parámetros que la impedirían. De todas formas, persiguen la excelencia y son de larga crianza.
El espumoso blanco fue presentado en 2016 con la añada de 2013, y cada año salen a mercado entre 10.000 y 12.000 botellas. El rosado, en cambio, no tiene continuidad anual, y de momento cuenta con las añadas 2017, 2019 y 2021. Está elaborado íntegramente con pinot noir, y solo se produce si lo permite la calidad de la cosecha.
Vardon Kennett, como bodega de vinos espumosos de alta gama de la Familia Torres, nació en 2013 "desde el inconformismo y la experimentación", con viñedos propios en cotas altas sobre el nivel del mar. Lo impulsó la quinta generación de Familia Torres (Miguel y Mireia Torres) y la enóloga Anna Velázquez, con más de 25 años de experiencia en el sector, quien se mantiene al frente del proyecto.
El nombre rinde homenaje a Daniel Vardon Kennett (1781-1835), comerciante marítimo inglés del siglo XIX que tras casarse con una catalana se asentó en el Penedès para elaborar sus propios vinos en la casa que hoy alberga la bodega en Santa Margarida d'Agulladolç, en el municipio de Mediona.