
Fumata blanca en tiempo de descuento. Los trabajadores de Siro dieron el visto bueno este sábado al Plan de Competitividad mejorado presentado por los fondos Davidson Kempner y Afendis para hacerse con el control de la compañía agroalimentaria y salvarla de la liquidación.
El Plan supone la inyección inmediata por parte del comprador de 50 millones de euros para el pago de las nóminas y de otros 80 millones para aliviar los problemas de Tesorería derivados de su elevada deuda -300 millones de euros- y atender a los proveedores. Además se compromete a destinar 100 millones de euros en dos años para la mejora de la capacidad productiva de las cinco plantas que tienen en España -tres en Venta de Baños, una en Aguilar de Campoó y otra en Toro-.
La situación de la empresa era agónica después de que el inversor hubiese retirado su oferta tras el rechazo de los trabajadores de tres de las cinco plantas a un Plan de Competitividad que exigía esfuerzos en materia salarial. Hace unos días la dirección de la compañía anunció la paralización de la producción ante la imposibilidad de comprar materias primas y el pago de la nómina del mes de mayo.
Finalmente, una nueva oferta por parte de los dos fondos lograda por la intermediación de la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha permitido convencer a los sindicatos y reconducir una situación que amenazaba los 1.700 empleos de la compañía agroalimentaria.
La propia Reyes Maroto tuvo que desplazarse a las tres plantas que debían votar el acuerdo -las otras dos habían dado su visto bueno al plan anterior- para lograr el apoyo a la nueva oferta de los fondos. Su advertencia fue clara: "O esto o el cierre de la empresa", advertía Maroto, quien desveló que las pérdida de Siro en 2021 se elevaron a 47 millones de euros.
En materia laboral, el plan prevé que en 2025 se recupere la pérdida salarial tras la congelación de las nóminas de manera que a partir de ese año se compensarán con un 8% más las nóminas en las plantas en las que se mantengan los niveles de producción y rentabilidad de 2021. El calendario laboral se amplía en 16 horas.
Tras la votación, los sindicatos y los comités de empresa mostraron su satisfacción por el desenlace. María José de la Iglesia, presidenta del comité de Toro, agradeció a la ministra su "implicación" en la negociación de condiciones con el nuevo inversor y su transparencia.
La representante sindical desveló que el rechazo anterior se produjo en parte por "la desconfianza que transmitía Siro" y que fue a través de la ministra cuando se enteraron de los abultados resultados negativos de la compañía el pasado año.
La Junta posibilitó el acuerdo
Mientras, la Junta de Castilla y León ha celebrado el acuerdo. "A pesar de la negativa del Gobierno central a trabajar de manera conjunta y coordinada y de su afán por capitalizar el acuerdo, la Junta ha posibilitado que el acuerdo entre la empresa y el inversor se haya concretado", señaló. En este sentido, hay que recordar que la última oferta del inversor llegó después de que Mañueco lograse que trabajadores y dirección volviesen a negociar.
Oportunidad para Venta de Baños
El acuerdo da una nueva oportunidad a una de las tres fábricas que la compañía tiene en Venta de Baños y cuyo cierre inminente había comunicado la dirección de Siro. Ahora, el plazo se alarga durante dos años, lo que da tiempo para comprobar la viabilidad de esa planta y ver si pueden derivarse a ella parte de las inversiones previstas por los fondos o para encontrar un inversor que garantice la viabilidad definitiva de la fábrica, la más antigua del grupo y que cuenta con un total de 187 trabajadores.