
Llega el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, y se suceden las estadísticas sobre brecha salarial de género o sobre las pocas mujeres que hay aún en los consejos de administración de las principales empresas. La mayoría de partidos políticos, a su vez, reivindican la figura de la mujer, abogan por la ampliación de sus derechos y hacen un llamamiento a la paridad en todos los órdenes. Sin embargo... ¿son las formaciones igualitarias en la composición de sus órganos de dirección?
Partiendo de la base de que ninguno de los cinco principales partidos políticos españoles a nivel nacional tiene ni ha tenido hasta la fecha una lideresa, haciendo un repaso a sus ejecutivas se puede apreciar que los esfuerzos hechos hasta la fecha han sido insuficientes. Con el paso de las décadas desde la Transición, ha aumentado el número de mujeres con importantes responsabilidades políticas. No obstante, en los férreos comités que dirigen los partidos y señalan a sus diputados en las Cámaras qué botón apretar, la representación sigue siendo eminentemente masculina. Aún así, los niveles varían entre las diferentes formaciones.
PSOE
Si algo ha caracterizado al PSOE durante el mandato de Pedro Sánchez ha sido la reivindicación del feminismo y de la paridad. Algo que no se ha acabado de trasladar a sus órganos de dirección. De las 48 personas que componen la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE -lo que se conoce como Ferraz-, 20 son mujeres (41,7%) y 28 hombres (58,3%). Hay que recordar que esta Ejecutiva socialista es la confeccionada a medida por Sánchez tras vencer en las primarias de 2017.
Dentro de la nomenclatura socialista, el partido sí cuenta con un 'número dos' mujer: Adriana Lastra, vicesecretaria general. El 'número tres' vuelve a ser un hombre: el secretario de Organización, José Luis Ábalos. A favor de los socialistas juega que la Presencia de la formación sí recae en una mujer, Cristina Narbona. En cualquier caso, se trata de un cargo simbólico respecto a lo que representa en otras formaciones.
PP
El PP cuenta con un Comité Ejecutivo compuesto por 93 personas, de las cuales sólo 29 son mujeres, lo que supone un 31,2% frente al 68,8% de hombres. Una baja sensible en este sentido ha sido la de la exsecretaria general del partido, María Dolores de Cospedal, que dejó su sillón en el Comité el pasado mes de noviembre, pero no ha sido reemplazada. Frente al PSOE, en su cúspide hay dos hombres, ya que Pablo Casado confió en Teodoro García-Egea como 'número dos' al frente de la Secretaría General que ocupó Cospedal.
Con todo, atendiendo a los cargos directivos, en la cúpula de la formación liderada por Pablo Casado sí aparecen más mujeres que hombres: cuatro de las seis vicesecretarías están ocupadas por féminas. También la portavoz parlamentaria en el Congreso ha sido una mujer en los últimos meses, ostentando el cargo la exministra Dolors Montserrat.
Cuestión no menor en este sentido fue la pugna sucesoria tras la marcha de Mariano Rajoy. Tantro la propia Cospedal como la ex vicepresidente Soraya Sáenz de Santamaría estuvieron cerca de haber logrado la Presidencia, lo que hubiese supuesto un hito en la política española. De la misma manera, la victoria de una de las dos hubiese implicado de forma casi segura que hubiera por primera vez una candidata mujer a la Presidencia del Gobierno desde uno de los principales partidos.
Ciudadanos
Lejos de aprobar se queda también Ciudadanos. El Comité Ejecutivo Nacional de los de Albert Rivera está formado por 37 personas, de las que 12 son mujeres (32,4%) y 25 son hombres (67,6%). Al igual que sucede en el PP, los dos primeros puestos corresponden a hombres: si Rivera es el presidente, José Manuel Villegas, 'número dos', es el secretario general.
El máximo baluarte femenino de Ciudadanos es Inés Arrimadas, lideresa del partido en Cataluña y 'número tres' del organigrama del partido atendiendo a su ubicación en la página web de la formación. Precisamente la creciente ascendencia de Arrimadas en la política española -intervino con fuerza en la campaña andaluza- ha hecho que el partido la sitúe ahora para encabezar la lista por Barcelona al Congreso en las elecciones del próximo 28 de abril.
Podemos
Por su parte, Podemos parece cumplir con su mensaje igualitario, al menos en su órgano directivo. El Consejo Ciudadano está integrado por 22 mujeres y 20 hombres al que habría que sumar al secretario general, Pablo Iglesias, quedando el reparto en un 51,1% de mujeres y un 48,9% de hombres. Al igual que el PSOE, su 'número dos' es una mujer, Irene Montero, y su 'número tres' otro hombre, Pablo Echenique.
Además, la asignación de las secretarías del partido es absolutamente paritario, con ocho para cada género. Pese a ello, el liderazgo del partido se torna claramente masculino cuando concurren a las elecciones, con especial incidencia en las autonómicas. De las 13 comunidades autónomas que se disputaron en las elecciones autonómicas de mayo de 2015, Podemos presentó como líderes de su formación a hombres en 11 autonomías, y solo a dos mujeres (en Canarias y Navarra). De los otros cuatro comicios que se han celebrado desde entonces, el partido morado se ha presentado de forma independiente o en confluencia con hombres al frente en dos ocasiones (Galicia y Cataluña) y mujeres en otras dos (País Vasco y Andalucía).
Vox
Aunque todavía fuera del Congreso, pero con pujanza en las encuestas después de entrar con 12 escaños en el Parlamento andaluz, Vox ostenta las peores estadísticas en este sentido. Partido abierta y públicamente contrario a la actual legislación en favor de la igualdad y contra la violencia de género, su Comité Ejecutivo Nacional (CEN) está integrado por 20 miembros: 15 de ellos son hombres (75%) y tan sólo cinco son mujeres (25%).
Idénticamente a lo que ocurre en PP y Ciudadanos, los dos más altos cargos de Vox corresponden a hombres: el presidente es Santiago Abascal y el secretario general es Javier Ortega Smith. De las tres vicepresidencias que tiene el partido, tanto la primera como la tercera recaen en hombres, siendo la segunda para una mujer.
Las elecciones de 2016
Pero los órganos directivos estatales no son la única forma de medir el balance de poder con perspectiva de género. Desde 2007, es obligatorio que las candidaturas a las elecciones generales se construyan a través de 'listas cremallera': tres hombres y dos mujeres o viceversa por cada bloque de cinco puestos. Sin embargo, la Ley de Igualdad no señala nada sobre las cabezas de lista.
Así, en las últimas elecciones generales, celebradas el 26 de junio de 2016, los hombres siguieron dominando el primer puesto de las listas en tres de los cuatro grandes partidos. De las 52 circunscripciones, el PP presentó un 36,5% de mujeres al frente de las candidaturas, mientras que en Ciudadanos eran el 28,8% y en Podemos el 38,4%. Sólo el PSOE, con 27 mujeres y 25 hombres, antepuso a sus candidatas.
En todo caso, el feminismo se ha hecho aún más presente en el debate público desde entonces, y cabría esperar que en los comicios del próximo 28 de abril se dé otro paso más hacia la paridad también en este aspecto.