
Fue el único miembro de su grupo que no votó en el Senado la aplicación del artículo 155, apelando a lo que fue hace años su cargo y condición, president de la Generalitat, y a su papel de "hombre bueno", que se dejó la piel como mediador para que no se aplicara la DUI, aunque su empeño resultó un fracaso "porque a Puigdemont le temblaron las piernas cuando le acusaron de traidor".
José Montilla (Iznájar, Córdoba, 1955), advirtió hace una década de que la creciente "desafección" de Cataluña hacia España terminaría en choque de trenes, y desgraciadamente su pronóstico se ha cumplido. Es un hombre tímido, reservado, de pocas palabras, que solo aparenta sentirse algo incómodo cuando la periodista le comenta su condición de charnego, que sus adversarios utilizaron para atacarle: "Muchos de los que me atacaban ni sabían lo que significaba la palabra, pero valía todo", se lamenta. La entrevista se celebra en el Senado, donde ese día había una actividad frenética, inusual en la Cámara Alta, que parece haber renacido con toda la actualidad catalana. Califica de anormalidad democrática que haya candidatos huidos o encarcelados en esta campaña, pide respeto a las resoluciones judiciales y acusa al expresidente de la Generalitat de utilizar en falso la palabra exilio y actuar de espaldas a sus votantes. Dice que Albert Rivera echa limón a las heridas en vez de tender puentes y ve a Miquel Iceta presidente "porque es un hombre de diálogo y pacto, algo fundamental en estos momentos ".
¿Qué le parece la decisión judicial de mantener en prisión a Junqueras, los 'Jordis' y Forn, y poner al resto en libertad?
No tengo por costumbre comentar decisiones judiciales. Estas se deben acatar y respetar, y yo las respeto y acato cuando gustan más y cuando no gustan.
¿Puede contaminar esto la campaña electoral recién iniciada?
Me remito a lo que ya ha dicho Miquel Iceta, quien afirmó que era una mala noticia que Junqueras, Forn y los dos Jordis sigan en prisión. Comparto plenamente sus palabras.
¿Es una anomalía democrática que haya empezado la campaña con candidatos encarcelados o huidos?
Sí, yo diría que esto es una anormalidad. No es normal en un Estado democrático que haya candidatos para las elecciones que estén huidos o en prisión, pero para un desarrollo no victimista de la campaña, lo mejor es que se pueda hablar realmente sobre programas y no se lancen eslóganes desde un plasma o desde la cárcel. En cualquier democracia, quien se aleja de la legalidad paga las consecuencias.
Sea como fuere, ¿que los imputados hayan aceptado la convocatoria de elecciones con el 155 es una marcha atrás o solo una retirara estratégica para aplazar la DUI?
Algunos son perfectamente conscientes de que la DUI era un acto retórico y teatral, que no iba a tener consecuencias jurídicas y de reconocimiento, y otros estaban convencidos de lo que hacían. En el independentismo hay retórica y cinismo, pero también hay verdaderos autos de fe, de gente que se cree las cosas increíbles y que no piden explicaciones cuando sus líderes cambian de opinión como han hecho.
¿Qué le parece que el señor Puigdemont haya huido, dejando a los suyos abandonados a su suerte, y se autodefina como exiliado?
Hay muchos independentistas y no independentistas que no ven con buenos ojos la huida. Esa huida teatral de Puigdemont y esa autoreivindicación de un gobierno en el exilio, presentándose a las elecciones, es un absurdo, porque no hay precedentes de un presidente en el exilio que se presente de candidato. Los verdaderos exiliados de la segunda república no podían ser candidatos, porque no había elecciones libres, ni democracia en España. Esa es la gran diferencia. Que Puigdemont hable de exilio es un absoluto sarcasmo y una desconsideración hacia los catalanes que en su momento le dieron el voto. También les ha dado la espalda a ellos.
Pero ahí está la cantinela de los presos políticos, que ya repiten hasta los niños de escuela...
Presos políticos hay en países donde no hay democracia, no se respetan las libertades, te meten en la cárcel por expresar tus ideas, reunirte, manifestarte, asociarte a un sindicato, o por hacer huelga... En España no hay presos políticos, hay políticos presos, como abogados presos o economistas presos. Aquí hay indicios razonables de comisión de delitos graves que figuran en el código penal, y lo que habrá finalmente es una sentencia de un tribunal, como está previsto en nuestro ordenamiento. Nadie en Europa les considera presos políticos.
Usted no votó en el Senado la aplicación del 155, al margen de su grupo parlamentario, ¿al final cómo ve su desarrollo?
Reconozco que las primeras decisiones que tomó el Gobierno de Mariano Rajoy en aplicación del 155 fueron adoptadas con prudencia y mesura. La convocatoria de elecciones fue un acierto, y la intervención sobre la administración de Cataluña, en líneas generales, es correcta. Yo lo que espero es que las elecciones normalicen la situación, y al ser investido un nuevo presidente quede sin efecto el 155.
¿Su grupo parlamentario entendió que usted no votara o lo hizo en conexión con el PSOE y el PSC?
Antes de la votación hablé tanto con el portavoz del grupo parlamentario como con el secretario general del PSOE y el primer secretario del PSC. En líneas generales, creo que entendieron mi posición, que era la de no participar en la votación, pero no por equidistancia, en absoluto, sino por coherencia con mi trayectoria política.
Hace años advirtió de que o las relaciones entre Cataluña y el resto de España se normalizaban o esto terminaría en choque de trenes. ¿Cómo ve que ahora algunos sitúen en su mandato como 'president' el inicio de este choque?
La primera vez que alerté sobre esto como un riesgo fue en el 2007, pero el crecimiento del independentismo no se atribuye solo al proyecto del estatuto de autonomía, a la sentencia del Tribunal Constitucional, que constituyó una afrenta para una parte muy importante de la sociedad catalana, sino que se acrecentó a rebufo de la crisis económica. El gran salto del independentismo se produce a partir de 2012, y entonces ya hacía dos años que yo me había marchado del Gobierno de Cataluña, ese ataque es un arma inventada por mis adversarios.
¿Da por liquidada la carrera política de Puigdemont y prevé un batacazo grande para el PDeCat?
Puigdemont ha arrastrado al PDeCat a una candidatura de corte populista, donde su partido está en minoría, porque los referentes orgánicos no han sido incluidos en la misma. No sé lo que será de ese proyecto, que es absolutamente personal. Soy tremendamente crítico con la candidatura que encabeza Puigdemont, que es de corte nacionalista populista. Yo espero que los ciudadanos le den la espalda, porque ha llevado Cataluña hacia la fractura social, el deterioro de su economía y la erosión de sus instituciones de autogobierno.
Usted fue uno de los mediadores, de los llamados "hombres buenos" que intentó evitar la DUI, ¿es cierto que Puigdemont no convocó elecciones asustado por la presión de los independentistas y radicales?
Sí, yo fui uno de esos mediadores que tratamos de evitar dos cosas: la DUI y el 155, porque si no había DUI no hubiera habido 155. Me consta que el Gobierno de España no tenía interés en poner en marcha ese artículo, y se vio obligado por las circunstancias. Tuve una reunión muy intensa con el presidente de la Generalitat y le dije claramente que él podía poner en riesgo su presidencia, pero no tenía derecho a poner en riesgo las instituciones, porque no eran suyas. Además, le insistí en que el 155 era posible pararlo si él convocaba las elecciones, y así hubiera sido. Puigdemont ha sido el responsable de su aplicación.
¿Y cambió de opinión porque fue prisionero de la CUP o se asustó cuando le llamaron traidor?
Un poco de todo. Hubo diputados de su partido que cuando se dijo que iba a anunciar la convocatoria de las elecciones por Twitter presentaron su baja, ERC, su socio, se plantó y le dijo que no contara con ellos, y luego las 155 monedas, las acusaciones de traidor, y la manifestación de los estudiantes hicieron que le temblaran las piernas. Twitter derrotó a la razón. Supongo que él no se veía paseando por el casco viejo de Girona y que le llamaran traidor, y optó por un camino que llevaba al precipicio a todos.
El último CIS da una posibilidad de victoria en votos a los partidos constitucionalistas, ¿se puede conformar un gobierno de ese perfil?
La política de pactos depende del resultado electoral, y este es incierto. Lo que no podemos hacer es especular en función de lo que nos dicen las encuestas, la palabra la tienen los ciudadanos y son los que la acaban definiendo, no nos engañemos. La política de alianzas se define no para ir contra otros, sino para ver qué hacer juntos. Ya veremos con quién podemos entendernos para solventar los problemas de los ciudadanos. Lo importante es ponerse de acuerdo en los temas que tienen que ver con el autogobierno, con rehacer los afectos, superar la brecha abierta en la sociedad catalana, reforzar la economía, prestigiar las instituciones, y el resto de las políticas.
Iceta ha dicho que con los independientes no piensa pactar. ¿El camino es no entenderse con quienes se han saltado la legalidad?
Es que no solo se han saltado la legalidad, sino que tampoco hacen propósito de enmienda. Es lógico que el candidato del PSC diga que no avalará a ningún candidato independentista. Nosotros diferimos de algunas formaciones políticas del llamado constitucionalismo, por lo que aquí tenemos un problema. Hay que mirar cómo tendemos puentes y cómo cosemos, en vez de poner dinamita o echar limón y sal en la herida, como están haciendo algunos de ese bloque.
¿Usted cree que Inés Arrimadas esta echando limón en la herida?
Inés no lo sé, pero Albert Rivera está dinamitando los puentes, en vez de intentar acercamientos. Teniendo en cuenta que no hay ninguna encuesta que diga que PP, Ciudadanos y PSC suman, ¿de dónde piensan sacar los votos? La sociedad catalana no necesita ni un gobierno ni un presidente que estén por una política de frentes, sino de aproximación, de cauterizar heridas, y aun sabiendo que no es fácil la tarea, están obligados a ello.
Pues la llave la pueden tener los 'comunes' y usted ha dicho que han sido los palmeros del independentismo...
Bueno, no todos los que ahora son comunes, pero que eran Catalunya Sí que es Pot, han hecho el juego a los independentistas. Algunos como Coscubiela o Rabell han sido un ejemplo, pero otros como el líder de Podemos en Cataluña, Dante Fachín, y otros de su grupo, han hecho de palmeros del independentismo. Tú no puedes ser equidistante cuando se pisotean derechos, se vulnera la Constitución, el estatuto o los derechos de la oposición, como ocurrió en aquel pleno de la vergüenza del Parlament. Podemos ha querido aparecer como equidistante, pero lo que han hecho es aplaudir al independentismo.
¿Podemos se puede jugar su supervivencia nacional en Cataluña?
El problema de Podemos es que no tienen un proyecto para España. Su único proyecto ha sido ir contra el PSOE, pero están demasiado atados a las llamadas confluencias como para tener un proyecto nacional. Hasta Carolina Bescansa se lo ha dicho claramente.
¿Pedro Sánchez ha consolidado su liderazgo con su posición sobre el 155, situándose al lado del PP?
Ha actuado con visión de Estado, cosa que no es fácil en este país, y sobre todo cuando se está en la oposición. Me hubiera gustado que Mariano Rajoy hubiera tenido esa visión cuando gobernaba Zapatero. La generosidad de visión de Estado se tiene no solo en el Gobierno, reclamándosela a los demás, sino en la oposición, ejerciéndola, y yo creo que eso es una cosa que le honra al secretario general del PSOE y tendrá su recompensa política.
¿Ve a Iceta presidente de la Generalitat, aunque sea como le ocurrió a usted, contra todo pronóstico porque le tacharon de 'charnego'...?
Sí, me llamaban charnego, incluso no sabiendo lo que significaba ese término. Miquel tiene la capacidad, el bagaje y la experiencia para ser president. Ha sido un gran parlamentario, trabajó en Moncloa, conoce las administraciones nacionales y locales, ha sido el líder del partido y portavoz parlamentario. Ha estado en todas las cocinas y tiene conocimiento, experiencia y liderazgo para ser presidente.
¿Él sí podría cerrar las heridas?
Hay dos clases de políticos: los que se dedican a crear problemas y los que se dedican a solventarlos. Miquel es de los segundos, sabe tender puentes, buscar acuerdos, es un hombre de diálogo y de pacto.
¿Los puentes sirven en perfiles tan agresivos políticamente como el del diputado Rufián?
La política espectáculo nunca me ha gustado. Ahora en la política hay demasiado teatro de mala calidad y ni yo ni muchos nos resignamos. Me consta que en ERC hay a mucha gente a quienes Rufián y sus numeritos les incomodan, y son cada día más, porque si tienen vocación de gobierno, ese modelo de política se les vuelve en contra.
¿Cataluña puede dejar de ser contribuyente neto de España si continúa la fuga de sedes, sigue cayendo el consumo y subiendo el paro?
Sí, esa es una de las secuelas del procés más preocupantes. Gran parte de las empresas, aunque ahora pudieran coser y diéramos certidumbre y seguridad, ya no volverán. Si el escenario del día 21 añade una prolongación de la incertidumbre y la inseguridad, la fuga de empresas continuará y se puede hipotecar aún más el futuro de las nuevas generaciones. Solo queda una empresa del Ibex con domicilio social en Cataluña y, utilizando la terminología de la UE, podríamos dejar de ser contribuyentes netos. Eso poniéndome un poco dramático.
¿Cambiar la Constitución puede ser un bálsamo o un motivo más de enfrentamiento?
Modificar la Constitución es necesario para su supervivencia. Los que votamos la Carta Magna y creemos que ha sido un éxito, también queremos que las próximas décadas sean de prosperidad y de convivencia, y la mejor manera de defender la Constitución es reformarla. En España todas las Constituciones que no se han reformado han quedado arrumbadas por otros procesos constituyentes.