
Prescindiendo de la críticas por la gestión del caso Moix, el Gobierno está exultante por la aprobación del trámite parlamentario de los Presupuestos Generales del Estado -calificado de hito político-, lo que presupone una legislatura larga en la que la participación de Ciudadanos, los partidos nacionalistas y las comunidades autónomas -incluso las gobernadas por el Partido Socialista- será clave.
Sólo en las pensiones, dentro del Pacto de Toledo, se atisba el punto más complicado para sacar adelante el programa reformista del Partido Popular.
La conversación telefónica que el pasado lunes mantuvieron Mariano Rajoy y Pedro Sánchez abre un nuevo camino de entendimiento con el principal partido de la oposición, al menos en las cuestiones que afectan al Estado. Fuentes gubernamentales consideran que materias como Cataluña, Defensa, política exterior, Brexit, o los compromisos europeos estarán fuera de la batalla ideológica. Sin embargo, Moncloa no comparte la misma sensación a la hora de hablar de los pactos que afecten al techo de gasto o a los Presupuestos que se negociarán desde el próximo mes de julio. Aquí, las esperanzas son nulas, a diferencia de asignaturas como la Educación y los Servicios Sociales, en las que las comunidades han manifestado buenas relaciones y mucha colaboración.
Ayer, el portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, comenzó su intervención augurando una legislatura larga, constructiva y fructífera a tenor de mayorías políticas que resuelven los problemas de los españoles frente a la confrontación de los partidos que sólo saben practicar el bloqueo.
Según el ministro portavoz del Gobierno, en España había cansancio por actuaciones estériles, de rango menor y del miedo. El Gobierno -abundó Méndez de Vigo- se impuso los Presupuestos como una necesidad y, parafraseando a Max Weber, ha actuado teniendo en cuenta la ética de la responsabilidad con unas cuentas "realistas, viables, sin cheques en blanco".
Prestaciones
En el capítulo de la valoración política, el ministro de Cultura recordó que los Presupuestos de 2017 permitirán que más de 14 millones de españoles sigan recibiendo algún tipo de prestación, conllevan un aumento de la financiación autonómica de más de 5.300 millones, un aumento del 7,6 por ciento de los recursos para Justicia, 100 millones más para Dependencia, un récord en becas, así como 4.000 millones más para pensiones. Hablando de cifras, Méndez de Vigo puso el acento en ensalzar los últimos datos en creación de empleo.
Entre los acuerdos alcanzados ayer en en el Consejo de Ministros, pasó por alto el Real Decreto que regula la titulación en ESO y en Bachillerato. Según éste, a partir de ahora y hasta que se materialice un pacto de Estado, los alumnos que terminen la ESO podrán lograrlo con dos suspensos y una media por debajo de cinco, mientras que los alumnos de Bachillerato necesitarán aprobarlo todo.
Asimismo, el Gobierno de Mariano Rajoy también negó este viernes de manera rotunda que en estos momentos esté sobre la mesa una negociación con el Ejecutivo vasco para acercar a los presos de ETA a centros penitenciarios de Euskadi o próximos a esta comunidad autónoma.